Saludable

Estos son los alimentos que contienen más sal y podrían poner en riesgo la salud

El consumo de sal es parte esencial de nuestra alimentación, pero su exceso podría causar problemas
jueves, 21 de enero de 2021 · 16:30

La sal es uno de los elementos imprescindibles dentro de la cocina, ya que es justo este elemento que le da un sabor especial a la comida al resaltar todos los sabores en ella. A diferencia del azúcar, la sal es uno de los ingredientes de los que difícilmente se puede dejar de lado en la cocina, incluso hay quienes aseguran que podrían dejar de agregar azúcar a sus bebidas, pero sería casi imposible poder eliminar la sal de sus alimentos. 

Al igual que muchos de los elementos, la sal es uno de los ingredientes que también necesita el organismo para funcionar de la forma adecuada, ya que esta ayuda a regular la presión arterial, mejora la circulación e incluso ayuda a que nos nervios y las fibras musculares pueden intercambiar mensajes de la forma correcta. Por otra parte, el consumo en exceso puede provocar efectos contrarios y provocar algunas enfermedades, por ejemplo, la retención de líquidos, presión elevada y hasta la hipertensión. 

Por desgracia, en los últimos años el consumo de comidas muy procesadas o empacadas, han incrementado de forma significativa el consumo de sal en nuestro organismo, lo que ha incrementado las enfermedades. De ahí la importancia de considerar llevar una dieta mucho más saludable e incluso fue la propuesta por la que ya no es muy común encontrar saleros en las mesas de los restaurantes a menos que los comensales la soliciten. 

Alimentos con alto contenido de sal

Cuando consumimos mucha sal, el cuerpo nos envía señales claras que no deberíamos dejar pasar, uno de los signos más claros es la hinchazón en lugares como manos, brazos, piernas, pies y tobillos. La sed, es otro de los ejemplos más claros que nuestro consumo de sal es excesivo, ya que el cuerpo intenta compensar el exceso de sodio (sal), pero al consumir agua de más se incrementa la hinchazón y la presión arterial. De ahí que debamos tener un balance en todo lo que consumimos. 

De acuerdo a lo señalado por la Federación Mexicana de Diabetes, uno de cada 4 adultos padece de hipertensión arterial a causa de una dieta rica en sodio y la falta de ejercicio, así como otros factores genéticos. Y no es que se trate de un problema que se pueda evitar al eliminar los saleros de la mesa, ya que el 75% del sodio que consumimos proviene de los alimentos envasados, procesados  y comida de restaurante.

Entre los alimentos con una alta cantidad de sodio podemos encontrar: 

  • Bollería
  • Embutidos (jamón, salchicha, etc)
  • Carne de aves o pescados marinados
  • Alimentos enlatados como frijoles, sopas en lata, instantáneas, precocidas, atún, pepinillos, entre otros. 
  • Salsa de soja
  • Sazonadores para caldos o carnes
  • Refrescos
  • Quesos naturales y procesados
  • Polvo para hornear
  • Comida precocida como pizza, dedos de queso y hasta pescados
  • Carnes ahumadas
  • Frituras

¿Cuánta sal se debe consumir al día?

Lo primero que hay que tomar en cuenta es que no todas las sales son iguales, ya que hay algunas que tienen un contenido más bajo de sodio, por lo que se recomienda consumir sales más puras, es decir menos procesadas. Y sobre todo introducir una mayor cantidad de frutas y verduras en nuestra dieta, así como evitar en lo más que se pueda el consumo de alimentos muy procesados o precocidos y en poco tiempo comenzarás a ver la diferencia. 

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo recomendado de sal en adultos es de 5 gramos por día, es decir, poco menos que una cucharada de té de sal por día. En el caso de los niños, la ingesta de sal debe ser menor a la cantidad recomendada en los adultos, pero no debe aplicarse durante el periodo de lactancia o durante la alimentación complementaria a la leche materna y hasta el primer año de edad. 

Durante el embarazo y el desarrollo en los primeros años del niño, la recomendación es consumir sal yodada, es decir, aquella que está enriquecida con yodo, ya que esta es necesaria para el desarrollo saludable del feto y del niño para optimizar las funciones mentales en general. Con el paso de los años, esta se puede ajustar de forma natural hasta llegar al consumo recomendado.