Aprende a preparar una rica sopa de tortilla con chile morita y pocos ingredientes; aquí la receta

La tortilla es uno de los alimentos más importantes para los mexicanos. Muchos no entenderíamos nuestras comidas sin ella, porque somos hijos de la cultura del maíz. Y es que nos guste o no, por nuestras venas corre más maíz que pizzas, hamburguesas o lo que te imagines, porque es uno de los ingredientes que ha permanecido en nuestra familia y dieta desde tiempos ancestrales. Por esa razón si viajáramos al extranjero, seguramente al comer algo con elote nos transportaría inmediatamente  a la tierra que nos vio nacer. 

De acuerdo con el Larousse de cocina, una tortilla es un disco plano de masa cocida de nixtamal o de harina de trigo que se elabora a mano o en una máquina de tortillas ( Como las de las tortillerías). Los mexicas la denominaban tlaxcalli y la preparaban de diversas formas y tamaños. Hoy en día, el tamaño estandarizado de las tortillas es de 12 y 18 centímetros de diámetro y pesa entre 30 y 40 gramos. Además, sirven para acompañar casi cualquier tipo de comida. 

Sin embargo, más allá de las definiciones, la tortilla es mucho más que eso, pues no sólo sirve para hacernos tacos o acompañar cualquier platillo, sirve para hacerlos y queda muy bien tanto en sopas como en guisados o hasta en bocadillos, como las quesadillas o las botanas en forma de totopos. La verdad es que el alimento es tan versátil, que lejos de acompañar o ser guarnición, puede ser una gran protagonista. 

¿Cómo se hace la sopa de tortilla?

Un claro ejemplo de la versatilidad de este alimento, es sin duda alguna la sopa de tortilla, también llamada sopa azteca. Es un platillo de gran tradición mexicana. Normalmente se elabora  con caldo de jitomates molidos, ajo y cebolla, sazonada con epazote, servida con tiras fritas de tortilla de maíz y chile pasilla, aguacate, queso asadero o fresco y crema. También se parece mucho a la sopa tarasca michoacana que se considera una variante de esta. 

Se cree que es originaria de Tlaxcala. Sin embargo, actualmente se ha extendido su consumo a todas las regiones tanto en las clases populares como en las acaudaladas. La receta también se ha exportado a otros países, como Guatemala, Honduras o Costa Rica, en donde el aguacate se sustituye por algún tipo de carne o leche. Sin embargo, incluso en México existen algunas ligeras variantes. 

Hoy nosotros decidimos compartir contigo una receta formidable para que hagas una rica sopa de tortilla, pero con chile morita, en lugar del pasilla, que es con el que se suele sazonar el caldillo de jitomate. Te aseguramos que el sabor es diferente, pero es super bueno. Así que si te gusta variarle un poquito a las recetas tradicionales, esta receta es para ti, pues sabemos que te dejará queriendo más. Esta receta te rinde para unas 3 o 4 porciones. 

Ingredientes

• 3 jitomates
• 1 diente de ajo 
• 1/4 de cebolla blanca
• 3 ramitas de cilantro fresco
• 2 cucharadas de aceite
• 1 litro de agua
• 1 cubo de consomé de pollo o vegetales
• 8 tortillas de maíz cortadas en julianas y fritas
• 2 chiles morita

¿Cómo se prepara?

1. Pon a tatemar un poco los jitomates, preferiblemente partidos en 2 o en 3 junto con uno de los chiles morita. 
2. Cuando veas que se les forma piel negrita o costrita, es momento de ponerlos a hervir en una cazuela con agua que los cubra por unos 10 minutos.
3. Después del tiempo, pon a licuar los jitomates, agua y chile junto con el ajo y la cebolla. 
4. Calienta el aceite en una cacerola y freír el jitomate licuado por 3 minutos a fuego medio. Agrega el cubo de sazonador o consomé. Deja que hierva por 5 minutos.
5. En el comal, deja tatemar el segundo chile, porque lo usarás para emplatar. 
6. Reparte una porción de tortillas en cada plato, agrega el caldo y sirve. 
7. Puedes agregarle crema, aguacate picado en cubitos, queso y chile morita tatemado espolvoreado. 
8. ¡Provecho!