Campeche: El paraíso gastronómico que cumple 480 años

La Villa de San Francisco de Campeche fue la primera en ser fundada por los españoles dentro de la península de Yucatán el 4 de octubre de 1540. Ciudad declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, que conserva las murallas, fuertes y baluartes que se usaron para proteger a la población de los ataques piratas, así como las ruinas y edificaciones de la cultura maya.

La cultura gastronómica del estado es producto del mestizaje, resultando en una mezcla de tradiciones, leyendas, historia y religión. En Campeche, cada uno de los cuatro barrios tradicionales tiene su patrono y con él las fiestas en las que la comida juega un papel fundamental. Las más representativas a nivel histórico se llevan a cabo durante septiembre y octubre, cuando se realizan los festejos en honor al Cristo Negro de San Román, la figura religiosa más venerada por la leyenda que le atribuye ser el protector de los marinos y los pescadores, así como la Vaquería Penínsular tradición compartida con Yucatán, donde al bailar se sostiene “la cabeza de cochino” y con la cual se da inicio a las actividades para celebrar el mes de la Campechanidad.

“No hay fiesta sin comida ni veneración sin ofrenda” en parte con esto se explica la tradición que llena de alegría al campechano al saber que después de cada evento, sentarse a la mesa significa disfrutar de los sabores de su tierra; definitivamente, si de algo saben mis paisanos es del buen vivir.

RIQUEZA CULINARIA DE TIERRA Y MAR

Para los viajeros y turistas, mi consejo es no perder la oportunidad de visitar el estado en los últimos meses del año, para disfrutar de sus calles llenas de color e historia, así como asistir a una “cenaduría” como localmente se le llama a los pequeños locales abiertos o al aire libre que dan servicio únicamente por las noches cuando el calor es sustituido por la brisa del mar y en los que se sirven platillos tradicionales como los tamales y panuchos rellenos de cazón generosamente bañados con una salsa de chiltomate y habanero, el caldo de gallina con carne blanca acompañado de tostadas fritas troceadas en su interior, las tortas de jamón claveteado, las aguas frescas con frutas de temporada,  como el marañón y la pitahaya y muchos otras opciones que convierten a Campeche en un destino donde no solo se “viaja en el tiempo” sino se sorprende al paladar con comida de sabor extraordinario elaborada sin pretensiones.

La oferta de productos del mar en la gastronomía campechana es extensa, siendo un pueblo de tradición pesquera, visitar lugares como Champotón e Isla Aguada o Pueblos Mágicos como Palizada, permite acceder a una amplia carta de pescados y mariscos que cuentan con fama mundial y que conquistan hasta el paladar más exigente. Cuando viajes por mi tierra, no olvides probar los camarones gigantes al coco, las jaibas rellenas, el pámpano en escabeche, el pargo frito, las manitas de cangrejo, el chile Xcatic relleno de camarones y todo lo que sus aguas cristalinas tienen para ofrecerte.

Feliz 480 aniversario a un rincón de México cuya herencia gastronómica enriquece a nuestro país.

Sabías qué Cam-Pech o Ah-Kim-Pech es el nombre original de esta región desde la era precolombina y significa en maya “tierra de serpientes y garrapatas”.

Clima:

En este estado se distinguen dos tipos: el cálido subhúmedo con regiones de lluvia en verano y principios de otoño que prevalece en la mayor parte del territorio campechano; en la de sequía se acentúa por la convergencia de vientos cálidos que provienen del este y suroeste.

Entérate que Campeche es uno de los principales centros pesqueros del país.

Las frutas de la región se emplean en la elaboración de conservas, como las de ciruela, guanábana o mango.

En 1540 se funda La Villa de San Francisco de Campeche

Ciudad de Campeche: capital del estado, fue víctima durante tres siglos —XVI, XVII y XVIII— de frecuentes y devastadores ataques de piratas ingleses, holandeses y franceses.