Bolillo pa'l susto: 3 datos que no sabías sobre esta creencia mexicana

Esta mañana de domingo nos despertó la alerta sísmica para que pudiéramos evacuar del sismo con magnitud de 6 grados, por lo que muchos de nosotros salimos corriendo directo a nuestro punto de evacuación, pero segundos después empezamos a imaginar algo más que a la Virgen en el cielo o bajo al Tepeyac. 

Estamos hablando de algo igualmente poderoso, pero para calmar el susto: El bolillo. Sí, ése alimento que se nos recomienda ingerir en México en todo momento cuando tiembla o pasamos alguna situación traumática, como un asalto, sobresalto, etc. Pero ¿en verdad funciona? o ¿Cómo surgió la idea de que los bolillos calman el susto?

 Muchas son las dudas que nos asaltan y aunque la UNAM dice que sí nos ayuda, sobre todo porque cuando nos espantamos nuestro estómago secreta jugos gástricos, los cuales no nos perjudican cuando ingerimos un alimento como este además de estabilizar los niveles de glucosa en la sangre. Así que por ése lado podemos estar tranquilos, pero la verdad es que siempre nos queda algo de curiosidad por saber de dónde surgió esta creencia. 

Por eso hoy compartiremos contigo algunos datos, que probablemente te interese saber sobre esta creencia del bolillo pa'l susto, que nos ha rodeado desde que éramos chiquitos. ¿Quién no recuerda a su abuelita o mamá diciéndole a alguien que se comiera un bolillo para quitar el espanto? Lo más seguro es que todos, así que viene bien conocer un poco más sobre la frase y cómo llegó hasta nuestros días. 

1. Origen incierto

El origen de la creencia es bastante incierto, pues aunque muchos se lo atribuyen a Camille Pirotte, el panadero francés que decidió enseñar a las tropas mexicanas algunos de los oficios franceses durante la intervención en terreno nacional, entre los cuales estaba la panadería, no fue él quien le dio la fama al bolillo pa'l susto. Otras fuentes señalan que consumir alimentos para el susto, proviene del pueblo otomí, quienes antiguamente preparaban hierbas con alcohol, que producían sudoración al ingerirse, pero en sí nadie sabe cómo surgió la creencia de que comer bolillo te bajaría el espanto. 

2. Mejora tus niveles de glucosa después de que te espantas

Cuando te espantas, tus niveles de glucosa se ven afectados y bajan, por lo que de acuerdo con Eduardo Calixto González, doctor en Neurociencias de la UNAM, cuando comes un bolillo o cualquier orto alimento, nos otorga rápidamente la glucosa que el cerebro está demandando, por lo que por eso sentimos que nos asienta bien cuando nos lo comemos. 

3. La frase "Un bolillo para el susto" viene de la medicina tradicional

El uso de esta frase comprende a viejas tradiciones medicinales antiguas en México, donde se recomendaba llevar este pan para aminorar el impacto de alguna mala noticia o catástrofe y aunque químicamente no sea lo más efectivo, sí te hace sentir mejor, por lo menos anímicamente.