7 alimentos que contribuyen a la retención de líquidos

No hay nada más horrible que despertarnos, vernos al espejo o incluso antes y sentir que estamos inflamadas. La verdad es que a nadie le gusta y menos si sientes que subiste de peso por esto o porque sospechas o tu doctor te dijo que es retención de líquidos.  Estamos casi seguras de que sí has escuchado ése termino o al menos hablar de lo molesta que puede llegar a ser, porque si te ha pasado, sabes que no es para nada grata. 

La retención de líquidos, según la definición médica, es un aumento de volumen causado por fluidos atrapados en los tejidos del cuerpo. También se le conoce como edema y afecta principalmente en pies y tobillos, pero también puede observarse en la espalda, manos o párpados. Se caracteriza, porque al presionar por algunos segundos sobre la zona afectada, se puede advertir una hendidura, que se llama "fovea". 

Un edema, puede ser el resultado de la fuerza de gravedad, especialmente por estar sentado o de pie por tiempo prolongado, lo que ocasiona que los líquidos del cuerpo bajen y se acumulen en las piernas o los pies, lo cual podría estar relacionado con un debilitamiento de las válvulas de las venas de las piernas, lo cual dificulta que estas puedan seguir llevando la sangre de vuelta al corazón. Esto suele presentarse en mujeres embarazadas o adultos mayores, aunque las personas con actividad sedentaria, no están exentas. 

Algunos de los casos más severos, pueden ser a consecuencia de la insuficiencia cardíaca, renal o hepática, así como cambios hormonales o hipertensión. En estos o cualquier otro caso, la ingesta de algunos alimentos podría provocar que se acentúe cualquiera de las condiciones anteriormente mencionadas, por lo que sería buena idea conocer de qué alimentos se trata, porque eventualmente si no lo hacemos, podríamos estarnos perjudicando involuntariamente. Así que ¡toma nota!

1. Sal

De por sí, justo debemos de limitar su consumo o al menos no exceder los 3,400 mg de sodio al día para evitar la retención de líquidos, hay algunas personas que tienen que reducir esto a menos de 2300 miligramos al día, lo cual equivale a una cucharadita de sal de mesa. Esto es, porque de exceder su consumo, podría acentuar las condiciones mencionadas.

2. Quesos curados o semicurados

Esto se debe a que tienen gran cantidad de sodio al ser concentrados lácteos e incluso por añadido artificial. Cuanto más curado esté un queso, más alto podría ser el porcentaje de sodio. Por ello es que debemos de limitar mucho su consumo y además beber mucha agua o comer más alimentos con fibra para evitar este malestar.

3. Embutidos

Los embutidos no se entienden sin sal, porque es justo lo que interviene en la curación y estabilización. La casi totalidad de los embutidos son altos en sodio.

4. Ahumados

Los alimentos con proceso de ahumado, también utilizan la sal como conservante, ya sea salmón, carnes ahumadas de mamíferos, etc. Así que comer esto frecuentemente, podría provocarnos también retención de líquidos. 

5. Pan y galletas

Tristemente, también los productos de harina panificada destacan por su porcentaje de sodio. Si comes pan, procura decantarte por el integral y sin sal.

6. Bebidas alcohólicas

Aunque su poder retenedor de líquidos no tiene nada que ver con el sodio, sí  con los procesos inflamatorios que provoca la presencia en el hígado de acetaldehído, metabolito intermedio del alcohol etílico.

7. Consomé en polvo

Debido a su contenido de glutamato monosódico, que en definitiva hace subir el sodio sérico, también es un alimento indeseado si lo que quieres es evitar la retención de líquidos.