¡No compres gato por liebre! 5 diferencias entre el queso panela original del de imitación: Profeco

Hace algunas semanas, se publicó un estudio realizado por la Procuraduría Federal del Consumidor, en el que se advertía sobre algunas mentiras por parte de algunas marcas, con respecto al contenido real de lo que vendían como queso panela y por esta razón, el alimento ahora está en el ojo del huracán, pues la lista publicada por la dependencia evaluó 30 quesos: 17 tipo panela, ocho reducidos en grasa, dos deslactosados y dos imitaciones.

El queso panela es un producto lácteo fresco que se elabora de forma artesanal o industrial con leche pasteurizada de vaca. No requiere maduración y se produce de  cuajadas semi desueradas y se sirve a menudo como parte de una bandeja de aperitivo o como acompañamiento que adereza platillos como los chilaquiles, los frijoles de la olla, las tostadas de tinga o incluso los sopes y tlacoyos, pues es elemento importante de la gastronomía mexicana. 

Sin embargo, al parecer cada vez es más complicado hallar uno original y auténtico, porque las marcas únicamente imitan (y a veces muy bien) su textura, olor y hasta sabor. Por eso, la Profeco se dio a la tarea de estudiar los quesos panela naturales e imitados, para emitir algunas de las características que diferencian a uno de otro. Por lo tanto, en esta ocasión decidimos traerlas para ti, por si planeabas ir al súper y así evitar que te vendan gato por liebre o lo que es lo mismo: Algo parecido a lo que buscas, pero no esto último.

1. Humedad 

El queso panela original suele presentar un alto contenido de humedad. Un 59% máximo, que puede incrementarse hasta 62% en los quesos reducidos en grasa, según el estudio, mientras que los quesos panela falsos o de "imitación", poseen una menor cantidad de suero o líquido que pone en duda su autenticidad. Este aspecto es importante, porque si tu producto está casi seco, puede tratarse de un queso sintético.

2. La corteza

Los quesos panela originales no tienen corteza o si la tienen es muy fina. Los que son imitación sí la llegan a tener. Así que si compras un producto de estos en el mercado o supermercado y te das cuenta que tiene una corteza, es muy posible que se trate de un queso imitación manchego, así que observa bien la textura y el color del queso, puesto que como tampoco se elabora con leche entera, sino con otra descremada reconstituida pasteurizada, su color puede ser más blanco de lo normal. 

3. Hongos

Un queso original al llevar un proceso ligeramente fermentado, con un considerable contenido de agua, se pueden generar condiciones para el desarrollo de microorganismos, por este motivo, para garantizar su inocuidad, es imprescindible que la elaboración, manipulación y conservación de los quesos sean adecuadas. Mientras que los quesos imitación tienden a durar más tiempo y además, adicionan concentrados de proteína (caseinatos) y otros aditivos.

4.Grasas y aceites vegetales

Los quesos de imitación suelen llevar no sólo leche descremada reconstituida y pasteurizada, sino grasas y o aceites vegetales parcialmente hidrogenados, mientras que los quesos panela originales suelen llevar tratamientos térmicos para prolongar la duración y garantizar la inocuidad. La NOM-243-SSA1-2010 establece los requisitos sanitarios que deben cumplir.

5. La etiqueta

Si tu producto dice por alguna razón palabras tales como "tipo", "estilo" o algún otro, ¡NO se trata de un queso panela 100% natural.