¿Qué significa comer con atención plena? Conoce las señales de hambre y saciedad y logra tu bienestar saludable

El acto de comer es tan habitual que la mayor parte del tiempo se realiza de manera automática, sin prestar demasiada atención. Pero ¿para qué poner atención al momento de ingerir alimentos? Mindful eating o comer con atención plena, tiene el objetivo de conectar con la comida de una manera distinta, abrazar un enfoque amoroso, compasivo y libre de juicios hacia la alimentación y el cuerpo. Es alejarnos de reglas y de juicios morales que se hacen a la comida y al cuerpo, para tomar un camino que brinda bienestar, paz y salud. 

Comer con atención plena se trata de estar completamente presente al momento de alimentarse, es decir;

1. Comer con todos los sentidos: prestar atención a la apariencia, textura, aroma, sonido y sabor del alimento. Reconectar con la experiencia corporal de la alimentación.

2. Saborear cada bocado: desde el primero hasta el último y distinguir como los sabores se van modificando.

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3. Honrar las señales de hambre y saciedad: si tengo hambre como, si ya me llené paro de comer. Además de reconocer los distintos tipos de hambre y satisfacerlas. 

4. Hacerse consciente de las elecciones de los alimentos que se van a comer, a qué velocidad comer, dónde ingerir los alimentos, a qué hora.

5. Fijarse en cómo influye el ambiente en la conducta alimentaria: compañía, clima, ruido, etc.

6. Prestar atención a todos los pensamientos, creencias, emociones y hábitos que se tienen respecto a la comida. 

Desarrollar habilidades para comer con atención plena requiere de tiempo y compromiso. También es importante entender que no hay una sola manera de comer “bien” o “correctamente”, que estos conceptos son muy personales, así como fluctuantes a través del tiempo. 

En el camino de comer con atención plena es probable que se descubra cuando se come por hambre física o emocional, así como cuando se hace por ocio o aburrimientos. Y lo interesante es que, en vez de generar culpa o restricción, comer con atención plena nos invita a ser curiosos en un proceso de autoconocimiento. Elegir relacionarse con la comida y el cuerpo desde un lugar más amoroso, menos rígido y tener confianza en el proceso. 

Además, es importante enfatizar que la comida no es simplemente energía y nutrimentos para el cuerpo, ya que adicionalmente brinda:

• Placer: a veces elegimos alimentos, un chocolate, por ejemplo, porque se disfruta el sabor, olor, textura, y porque da una sensación de bienestar. Es raro que se elija por las características de su aporte nutrimental.
• Nos conecta con otras personas y culturas

Se piensa que para tener una alimentación saludable es imprescindible renunciar a muchos alimentos que se disfrutan, pero en realidad es de suma importancia disfrutar plenamente de lo que se come sin que se genere culpa porque “ya se arruinó la dieta”. La alimentación con atención plena nos invita a darle espacio a esos alimentos que frecuentemente se restringen por miedo, y a saborearlos con consciencia y así es muy probable que un trozo sea más satisfactorio que la barra completa. 

La alimentación con atención plena es una práctica que invita a mejorar la relación con la comida y nutrirse conectando con las señales corporales. No es un enfoque pensado como una dieta más, ya que, en sí no tiene por objetivo la perdida de peso, en cambio sí promueve conductas y hábitos de salud que generen bienestar integral en la persona que lo practica. 

En conclusión, comer con atención plena empodera a quién lo trabaja para hacer elecciones alimentarias de manera consciente y no reactivas. Del mismo modo, permite comenzar a comer y parar respondiendo a las señales corporales y validar cada una de nuestras necesidades. Comprender porque se come lo que se come será un gran maestro para orientarse hacia la salud.

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