"¡Somos lo que comemos!" Cómo evitar la intoxicación por metales pesados

“Somos lo que comemos” es algo que se escucha mucho por todos lados y ha aparecido incluso en varias campañas de marketing de salud, y si tiene mucho de cierto, sin embargo, los estudios más recientes nos dicen que no solo somos lo que comemos si no, lo que absorbemos ya que la única manera que tiene nuestro cuerpo de meter substancias no es mediante la alimentación, sino, también mediante la piel, la respiración, los ojos, etc. 

Todos nosotros estamos expuestos día a día a miles de sustancias tóxicas que pueden afectar nuestra salud, aquí hablaremos específicamente de unas de las sustancias más dañinas en el cuerpo que son los metales pesados, los cuales se pueden llegar a acumular en el cuerpo y causar ruptura de las membranas celulares o sea daños a células de diferentes órganos siendo los favoritos los tejidos grasos como el hígado y el cerebro afectando así su función correcta pudiendo llegar a presentar enfermedades como Alzheimer y Parkinson. ¿A que nunca te imaginaste que enfermedades como estas estuvieran asociadas a exposición y acumulación de metales pesados en el cuerpo? Por lo tanto, esto significa que son completamente prevenibles si cuidamos lo que absorbemos. 

Escucha el podcast de Punto Saludable con más información de qué alimentos evitar para absorber y evitar una intoxicación por metales pesados  

La intoxicación de estos metales puede ser aguda, que significa tener una alta exposición al tóxico por un corto tiempo o crónica, que significa que se esta expuesto al tóxico por un largo tiempo, pero a dosis bajas que no permiten que se identifique fácilmente ya que los síntomas son más vagos. 

Ahora sí, hablemos de cuáles son los metales pesados más comunes:

Plomo: se encuentra en baterías de los coches, tubos PVC, cristal y cerámicas, ciertos tintes para el cabello, maquillaje barato o “pirata”, pigmento de pinturas. Los efectos a la salud del plomo pueden ser, hiperactividad y problemas de atención, anemia, estreñimiento, diarrea, sabor metálico en la boca, alteraciones en sistema inmune.

Mercurio: se encuentra en pescados grandes como el atún y el salmón al igual que en moluscos, plásticos, tintas de impresoras, pesticidas, luces de neón y bombillas económicas, amalgamas, conservante de vacunas, tiomersal. Puede causar, temblores musculares, parálisis y convulsiones, problemas en la boca como mucha producción de saliva y dolor de encías, hiperactividad, autismo, fatiga. 

Cadmio: se encuentra principalmente en el humo de los cigarros y de los escapes de los coches, pilas recargables de niquel-cadmio, aplicaciones electrónicas y revestimientos que son resistentes a la corrosión. Lo que puede ocasionar una intoxicación por cadmio es: enfisema pulmonar, insuficiencia renal, bajo sistema inmune y huesos débiles. 

Aluminio: el aluminio se puede encontrar en muchos lugares bastante comunes como el agua de grifo, utensilios de cocina con teflón, muchos colorantes y aditivos en los alimentos (E520, E521, E522, E523), polvo para hornear, cosméticos, ciertas pastas de dientes y sobre todo en los desodorantes, vacunas y medicamentos con hidróxido de aluminio. Algunas de las enfermedades asociadas al aluminio son: pérdida de memoria, Alzheimer, osteoporosis, dolores musculares, anemia, problemas digestivos, insuficiencia renal, etc. 

Arsénico: este metal pesado esta presente principalmente en el insecticida usado para la producción de arroz, legumbres y trigo, también presente en la industria de vidrio y pigmento, así como en aparatos electrónicos y aleaciones. El arsénico puede provocar, debilidad, confusión dolores de cabeza, convulsiones, dolores musculares y asociados a nervios. 

Hay ciertas personas que aún estando expuestas a estos metales no sufren intoxicación y esto es debido a que tienen una capacidad correcta de eliminación y desintoxicación por parte del intestino y del hígado. 

Para poder ayudar al cuerpo a eliminar estos metales pesados existen las terapias de quelación que son terapias intravenosas de agentes que se unen a los metales y los hacen solubles en la sangre para que se puedan excretar en orina. Aunque ojo, para hacer esta terapia tenemos que estar seguros de si hay metales pesados que eliminar de tu cuerpo, para esto los primeros focos rojos es que tengas alguno de los síntomas ya platicados o enfermedades como arterosclerosis o cualquier enfermedad vascular, artritis, problemas cognitivos, disminución de memoria y atención. 

Hay suplementos que igualmente actúan como quelantes como la vitamina C, alga clorella, NAC, acido alfa lipóico y el glutatión, por lo que si no nos someteremos a una terapia de quelación intravenosa podremos incluir en nuestro día a día estos suplementos para ayudar a nuestro cuerpo a desintoxicarse, existen también alimentos como los dientes de ajo que contienen alicina o los alimentos verdes ricos en clorofila, perejil, berros, pimientos, kale, que también nos ayudan al tratamiento. 

Una buena desintoxicación requiere de un buen estado de hidratación y una dieta correcta que incluya grasas ricas en omegas para que las toxinas liposolubles logren eliminarse y muy rica en antioxidantes como frutas y verduras de todos los colores para ayudar a evitar la oxidación dentro del cuerpo.

Te invito a que hagas conciencia sobre todo lo que puedes estar absorbiendo que tenga tóxicos presentes como estos metales pesados ya que aunque nuestra alimentación sea impecable, no fumemos, hagamos ejercicio etc, simplemente por usar diario desodorante, comer pescado o usar nuestro sartén de teflón podemos estar poniendo en riesgo a nuestro cuerpo, igualmente si tienes niños ten mucho cuidado con los colorantes en dulces y alimentos ya que pueden afectar de manera severa su comportamiento, incluso llegando a presentar síntomas parecidos o iguales a los del autismo. ¡Recuerda que no somos lo que comemos, sino, lo que absorbemos!

Sigue leyendo: 

Mitos que te hacen creer que deberías evitar los carbohidratos

Migraña y alimentación: lo que sabemos, lo que no sabemos y lo que quisiéramos saber

mgm