Saludable

Una dieta baja en grasas no garantiza una buena salud, en especial para el corazón

Por años se ha creído que la grasa se deben evitar para mejorar la salud, pero esto no es del todo cierto y te decimos porqué
miércoles, 7 de abril de 2021 · 15:54

Durante años hemos vivido bajo una serie de reglas que se tenían que cumplir para que se considerara que se lleva una dieta para bajar de peso o tratar problemas específicos. Una de las ideas que con el paso de los años ha pasado de moda es considerar la eliminación de la grasa de nuestra alimentación, ya que esta comúnmente es asociada con el sobrepeso, obesidad y hasta los problemas del corazón. 

En la última década, especialistas de la salud han descartado que el consumo bajo de grasas esté relacionado con una buena salud y muy en especial con la prevención de problemas cardíacos, por lo que se ha dejado de aconsejar a las personas que sigan dietas muy estrictas y bajas en grasas. Aunque hay que dejar en claro que esto no quiere decir que las grasas sean buenas, sino por el contrario saber qué tipos de grasa son las que benefician a nuestro cuerpo y las que no lo hacen. 

Según lo señalado por la Universidad de Medicina de Harvard, la gran diferencia radica en el tipo de grasas que se elija para balancear la dieta a una considerada como saludable, centrando la atención en el consumo de verduras, frutas, granos integrales, frijoles, así como en modestas cantidades de carnes, lácteos, huevos y dulces. La efectividad de un buen régimen alimenticio se encuentra en el consumo de una mayor cantidad de alimentos de origen vegetal, enteros o mínimamente procesados, lo que ayudará a reducir la ingesta de grasas saturadas. 

Entonces, ¿de dónde nace la idea de una dieta baja en grasa? Bueno, esta idea que nos ha acompañado por 40 años se da durante la década de los 80, cuando se comenzaron a popularizar los alimentos bajos en grasa, pero a su vez fueron sustituidos por harinas como panes, papas fritas, galletas bajas en grasas y yogurt azucarado. Este desequilibrio reemplazo las grasas y llenó el cuerpo de azúcares refinados, ocasionando la liberación de insulina que eventualmente se transformó en problemas de sobrepeso y diabetes, ambas muy relacionadas con un mayor riesgo de una enfermedad cardíaca. 

De ahí la importancia de saber qué tipos de grasa se pueden ingerir sin tener que afectar el cuerpo de una u otra forma. Alimentos como nueces, semillas, aceitunas, aguacates, pescado y hasta el aceite de oliva, son buenos ejemplos de los alimentos que añaden grasas buenas a nuestra alimentación sin tener que poner en riesgo la salud y sobre todo ayudarnos a llevar una dieta mucho más saludable que nos permita reducir la posibilidad de padecer problemas como sobrepeso, diabetes y enfermedades cardíacas. 

¿Qué se debe integrar a una dieta saludable?

En los últimos años la dieta mediterránea ha ganado terreno en el mundo de la alimentación saludable, ya que es justo esta la que es considerada como una de las mejores para la salud y hasta para prolongar la vida. Y no se trata de cambiar de dieta de un día para otro, sino de ir poco a poco cambiando algunos productos para acostumbrarse a un nuevo estilo de alimentación, un buen comienzo sería añadir una buena porción de ensalada en cada comida y de forma paulatina ir cambiando otros productos como los refrescos por el agua.