Pestiños con miel un postre tradicional de Semana Santa que puedes hacer en casa

La Semana Santa no sería la misma sin las preparaciones de postres dulces tan características de esta temporada, tal es el caso de los famosos pestiños con miel. Se trata de una de las recetas típicas del sur de España la cual también se puede disfrutar en Navidad o en el Día de Todos los Santos, al igual que los buñuelos o la leche frita, mismo que se pueden disfrutar solo o acompañados con la bebida de tu preferencia. 

Son varias las recetas que se pueden encontrar para la elaboración de los pestiños, pero lo más tradicionales son los que se bañan con una salsa de miel que hace que tengan esa apariencia como cristalizada que los hace aún más atractivos para la vista. Hay quienes prefieren espolvorear un poco de azúcar glass y canela en vez de usar la miel, pero todo dependerá del lugar en el que los probemos o la forma en la que se quieran elaborar. 

Pestiños con miel

Ingredientes: 

• 300 gr de harina
• 50 ml de vino blanco
• 50 ml de anís
• 100 ml de aceite de oliva virgen extra
• Cáscara de un limón
• 1 rama de canela
• 1 cucharadita de sal
• 100 gr de miel 
• 2 cucharadas de agua
• Aceite vegetal para freír

Preparación: 

1.- En una sartén coloca el aceite de oliva junto con la cáscara de limón y la raja de canela. Deja cocinar a fuego medio hasta que la cáscara de limón y la canela se hayan freído. Retira estos dos últimos ingredientes y deja reposar. Reserva. 

TIP: Intenta utilizar la cáscara de limón con la menor cantidad de partes blancas, ya que estás harán que tu preparación se amargue y tenga un sabor extraño a la hora de mezclar. 

2.- En un tazón amplio, coloca la harina junto con el aceite aromatizado, vino blanco, anís y la sal. Mezcla poco a poco para que los ingredientes comiencen a formar una masa suave. Sabrás que está lista cuando esta masa se despega de forma sencilla del tazón o de las manos. 

3.- En una superficie limpia y plana, coloca la masa que acabas de hacer y extiende con ayuda de un rodillo. Debes tomar en cuenta que el grosos no debe ser muy delgado o amplio, ya que se debe poder manipular con las manos sin que se rompa. Con ayuda de un cortador cuadrado o rectangular y cortamos por toda la superficie de la masa. 

4.- Una vez que estén marcados los cortes, toma los dos extremos opuestos de cada cuadrado y júntalos hacía en centro haciendo una especie de unión. Presiona con los dedos para que queden firmes y no se desprendan a la hora de cocinar. 

5.- En una sartén coloca suficiente aceite para freír y deja calentar por un par de minutos, enseguida vierte poco a poco los pestiños y deja cocinar por unos 4 minutos de cada lado o bien hasta que comiencen a dorarse. Realiza este paso en tandas pequeñas, así los pestiños se cocinarán de forma uniforme y no quedarán quemados o sin freír de forma adecuada. 

6.- Retira del aceite y deja escurrir en un papel de cocina absorbente para eliminar el exceso de aceite. 

7.- En otra sartén, añade la miel junto con el agua y deja cocinar a fuego lento hasta que comience a caramelizar, enseguida vierte los pestiños dentro de esta mezcla y deja que todo se incorpore a la preparación. Una vez que los pestiños estén bien bañados con la miel, retira del sartén y deja enfriar antes de servir. Disfruta.