5 errores comunes que se cometen al momento de preparar un jugo de vegetales

Preparar jugos puede que se haya vuelto nuestro otro hábito matutino además del café, pero más saludable. Los hay de todos los colores, sabores, texturas y combinaciones. Es una manera super práctica de desayunar algo con todos los nutrientes necesarios en la primera comida del día después de al menos 6 u 8 horas de ayuno. Por eso siempre es importante que elijas los mejores para que tu dosis de vitaminas y minerales esté completa. 

Sin embargo, de acuerdo con algunos expertos, sí que hay algunos peligros por abusar de su consumo y si se nos va la mano, podemos perjudicar nuestra salud más allá de beneficiarla. También, a la hora de elaborar jugos podemos caer en algunos errores, sobre todo cuando no estamos tan acostumbradas o somos nuevas preparando estas bebidas naturales. 

Por eso, hoy hemos decidido compartir contigo compartir algunos de los errores más comunes que podemos cometer cuando  preparamos jugos y te decimos cómo resolverlo para que esto deje de ser un problema. Así que ¡Toma nota!, porque esto seguramente te puede sacar de apuros y además evitar que pases literalmente un mal trago. 

1. Exprimir en lugar de licuar

Mucho nos han digo de que si usamos este aparato no aprovechamos bien la fibra, cuando en realidad esto es un mito, porque muchas veces al exprimir, sólo extraemos el líquido y tiramos a la basura la cáscara, muchas veces llena de fibra. De acuerdo con los expertos en nutrición, lo mejor es usar la licuadora trituradora para poder poner el alimento lo más íntegro posible y rescatar la pulpa. 

2. No elegirlas o lavarlas bien

Muchas veces nos confiamos y elegimos lo primero que nos encontramos para nuestro jugo. ¡No! Recuerda que una materia prima es básica para elaborar nuestra bebida. De lo contrario el sabor puede verse modificado y puede que ya no nos guste tanto. También es primordial que laves muy bien tus vegetales, pues toma en cuenta que te los llevarás a la boca. 

3. No quitar semillas 

Lo sabemos, retirar semillas es un paso engorroso, pero es necesario. Sobre todo en frutas como la naranja o el limón, que aunque estas pueden ser molidas, si dejas tu jugo para el otro día, este se amarga.  En el caso de los vegetales esto casi no ocurre, pero sí es importante que no tengan hojas oxidadas o tierra en el tallo, como en la lechuga, cilantro, etc. 

4. Agregar azúcar 

Por vigésimo quinta ocasión: ¡No! Los jugos no llevan azúcar, porque si los combinas con alguna fruta, que es lo más seguro o común, estos ya llevan fructuosa, que no es poca y si le echas endulcorantes, pueden no cumplir con su función de bajarte los triglicéridos, por ejemplo. 

5. Tomarlos todos los días a toda hora

Como son deliciosos, puede pasar que  no sólo lo tomes por la mañana, sino en la tarde y en la noche, pero ¡Alto ahí! Tienes que medirte y saber que no puedes beberlos todo el tiempo a menos de que la dieta que sigues así lo necesite o de lo contrario, puedes presentar irritación estomacal. De acuerdo con Hardvard, sólo debemos de tomar 1 al día.