Esta es la propuesta de unos jóvenes para convertir el unicel en alimento para ganado

Los empaques desechables elaborados con unicel están prohibidos en doce estados de la República Mexicana desde el año 2021, estos empaques usualmente son utilizados para el almacenamiento de alimentos y se han vuelto habituales una vez que se adquiere comida para llevar, sin embargo, el tiempo aproximado para su degradación es de 800 años.

En México se estima que cada año se llagan a consumir hasta 125 mil toneladas de unicel, por lo que este tema ha sido central para buscar alternativas para su uso. Un nuevo proyecto en el que participan jóvenes universitarios de tres instituciones diferentes, incluyendo a un alumno de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), han creado un proyecto donde manifiestan una forma sustentable para degradar el unicel en dos días y convertirlo en alimento.

Diego Tonatiuh Hernández Martínez, alumno de la Licenciatura en Ciencias de la Tierra, de la Facultad de Ciencias de la UNAM, forma parte del proyecto Gusani, el cual obtuvo el tercer sitio del Premio Santander X, en la categoría Lanza, el cual consistió en asesoría y un estilo económico para desarrollar el emprendimiento.

¿En qué consiste el proyecto?

El joven universitario a través de un video compartido por la misma institución comenta que proyecto busca reducir la cantidad de unicel que se encuentra en el planeta a partir de un gusano de la harina (Tenebrio molitor), este gusano tiene la capacidad de asimilar el unicel y convertirlo en materia orgánica, esto a su vez se podría utilizar en alimento para ganadería.

El gusano de la harina se encuentra entre rocas y troncos o en almacenes de grano, al ser puesto en cajas de unicel las consume y las transforma en lo que sería el polvo para la harina. Dicho proceso permite que los gusanos crezcan y se reproduzcan, posteriormente se conviertan en escarabajos (su siguiente estadio de vida). La harina de gusano es rica en proteína, económica y sustentable.

El unicel es un material que ya nos hemos acostumbrado siendo indispensable para transportar alimentos perecederos como cárnicos y pescados. Lo bueno de este producto es que nos podría ayudar a reducir el impacto de carbono de este material, detalló el universitario.

Actualmente solo se produce alimento para ganado, pero se espera que en el futuro se pueda ser utilizada para la creación de alimentos aptos para el consumo humano como suplementos alimenticios y galletas.