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Esta es la razón por la que la realeza británica se pesa después de Navidad
En esta tradición navideña, Isabel II esperaba que toda su familia o invitados ganaran un poco de peso extra en la época navideñaLa película Spencer protagonizada por la actriz Kristen Stewart como la Princesa Diana reveló algunas tradiciones que se llevaban a cabo en la familia real, pero una acción en particular fue la que llamó la atención y es que en una escena se ve a Lady Di calcular su peso en una báscula previo a la cena de Navidad.
Esta escena muestra a los sirvientes del Palacio puliendo una vieja balanza en la que supuestamente la realeza debe pesarse antes y después de Navidad. Esta presunta tradición navideña sin duda alguna causó revuelo, preguntándonos si es verdad que la realeza británica tiene que hacerlo en las fiestas decembrinas.
Al menos en la película, Isabel II espera que tanto Lady Di como el resto de sus invitados ganen al menos tres libras (cerca de kilo y medio) durante su estancia navideña, es por eso que antes de la cena se deben de pesar y después de pasar las fiestas, al dejar el Palacio deben de volver a calcular su peso.
Dicha tradición se remonta desde la antigüedad cuando el príncipe de Gales y luego rey Eduardo VII, solía hacer pesarse a sus invitados para comprobar que habían engordado durante su estancia. Esto solo tiene un objetivo y es comprobar que todos disfrutaron de su estancia, degustado seguramente de una rica comida que al final de las fiestas se ve reflejado en ganar unos kilos de más.
Tan solo en 2018, la revista especializada en realeza Majesty Magazine, aseguró que la entonces reina Isabel ll seguía pesando a sus invitados en la temporada navideña. Aunque hasta el momento ninguno de los integrantes de la familia real británica ha hablado públicamente sobre el tema.
No obstante, en Spencer se dejó ver que esta tradición navideña es una de las más particulares dentro de la monarquía y seguro muchos se preguntaron por qué se llevaba a cabo, ahora sabes que en realidad se trata de una curiosa forma de comprobar si realmente los invitados disfrutaron de la época en familia.