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Esto es lo que sabemos de la disputa por el champán entre Rusia y Francia

El mandatario ruso ahora es conocido por "robarse la icónica bebida francesa" tras firmar una nueva ley
miércoles, 7 de julio de 2021 · 10:23

El viernes pasado, el presidente ruso Valdimir Putin, firmó una nueva ley que decreta que solo los 'shampanskoe'- bebidas populares y espumosas creadas en la época soviética que buscaban democratizar el lujo- pueden etiquetarse como champán a partir de ahora en Rusia; mientras que las provenientes de la provincia de Champaña, Francia, serán catalogadas como 'vino espumoso'

El mandatario ruso, quien ahora es conocido por "robarse la icónica bebida francesa" ha desatado múltiples críticas e indignación por parte de productores franceses. Por su parte, el gobierno francés ha decidido no quedarse de brazos cruzados, pues este martes señaló que el champán solo se produce en la región de Champaña, que le da nombre y ha comenzado a movilizarse para solucionar esta disputa.

La historia de Rusia con el champán

En 1920 la ley seca fue abolida en Rusia, por lo que el gobierno de Stalin dio la indicación de crear un vino espumoso mucho más asequible que pudiera llegar a toda la población, incluida la clase trabajadora. Fue entonces que los enólogos creó una versión soviética del champán que posteriormente se convirtió en el conocido shampanskoe, típico en las fiestas y en la víspera de Año Nuevo.

No obstante, esta norma no solo está pensada en el origen de la bebida rusa, sino que es parte de una serie de leyes y reformas del proteccionismo ruso que han tenido que tomarse debido al bajo crecimiento económico que el país ha tenido desde que ha sido sujeto a una serie de sanciones por parte de Occidente.

Francia: Profunda indignación

De acuerdo con la agencia EFE, la posición de Francia es muy clara: la palabra champán viene de esa región francesa donde se produce y que tiene una denominación de origen. Por lo mismo, el 'Comité Champagne', que agrupa a todos los sectores -como viticultores y bodegas- relacionados con la producción de la bebida, afirmó que está "escandalizado" por la legislación rusa.

El comité recordó que la denominación de origen de la bebida es vigente en más de 120 países y asegura que las nuevas medidas legales rusas no permitirían información clara y transparente sobre el origen y las características de los vinos para la población de ese país. 

No obstante, algunos especialistas en la materia de nacionalidad rusa aseguran que el champán nunca ha estado protegido legalmente porque ese país no reconoce el sistema internacional de protección de denominaciones de origen. De hecho, viéndolo desde otra perspectiva, la palabra champán no significa "elaborado en Champaña", sino vinos secos, semisecos, dulces y otros de todo tipo con burbujas.

Comienza la disputa

Medios franceses han señalado que no solo es un asunto de indignación nacionalista, sino de un problema de escasa entidad económica, pues Rusia solo es el decimoquinto destino de las exportaciones del champán; un mercado bastante pequeño en comparación con otros países como lo son Estados Unidos, Reino Unido y Japón, los tres principales destinos.

Por ello, los productores franceses ha pedido que las empresas dejen de enviar sus vinos a Rusia hasta que la situación se aclare, y ha demandado a la misma Unión Europea y al gobierno francés que consigan "la modificación de una ley inaceptable".

Moët Hennessy, una de las firmas más prestigiosas de esta bebida había acordado sumarse a esta medida, sin embargo, a partir del domingo pasado, decidió resignarse y adaptarse a las nuevas medidas del etiquetado.

Gobierno apuesta por la diplomacia

Ante una situación repleta de tensión, la administración francesa apostó este martes por el diálogo. El ministro de Exteriores, Jean-Yves Le Drian, aseguró en el pleno de la Asamblea Nacional de esta semana que van a trabajar con Rusia, a nivel bilateral y de la Unión Europea, "para defender los intereses de nuestros productores y, sobre todo, de nuestras indicaciones geográficas".

Le Drian confió en solucionar el conflicto a través del "diálogo", pero advirtió de que París recurrirá a la Organización Mundial de Comercio (OMC) si lo considera necesario.