Esta es la historia de cómo los cacahuates se volvieron el amuleto de la suerte de la NASA

El pasado 18 de febrero, una vez mas la NASA hace historia en la vida, luego de que el perseverance descendió en Marte para investigar signos de vida en el planeta rojo, lo cual podría considerarse como otro gran avance para la humanidad. Si bien, este hecho representa un gran avance, hay un dato curioso que seguramente querrías conocer y que probablemente es por lo que has parado en esta nota y si, estamos hablando de los cacahuates de la suerte que acompañan a los ingenieros de la Administración Nacional de Aeronaútica y el Espacio, una historia que compartió Diana Trujillo, una de las mujeres que lideró la transmisión para la comunidad de habla hispana.

En 1964 la misión Ranger 7 estaba por cumplir algo que se había intentado por 6 veces y que nada había sido logrado con éxito. La situación era bastante estresante, las personas estaban muy tensas y en verdad querían que saliera bien, después de todo no habría 7 malas, pero ahora querían que saliera en verdad. Ante tal cosa, Dick Wallace, ingeniero de trayectoria de la misión, decidió repartir cacahuates a sus compañeros, con la intención de relajarlos.

Para suerte, fortuna o como se le quiera llamar, después de los cacahuates en al mesa, las misiones Ranger 7, 8 y 9 se realizaron sin ningún contratiempo y con gran éxito logrando fotografiar las zonas de aterrizaje de Apolo en la Luna. A partir de ese momento se consideran un amuleto de la suerte los cacahuates y aparecen en todas las cuentas regresivas de lanzamiento de la NASA.

Como bien dicen, quizá solo era parte del destino y se trate de una mera coincidencia, pero al final creemos que puede representar algo bueno para las personas y hacerles creer que las cosas son posibles, cuando les pones el esfuerzo y la dedicación necesaria.