Comida libanesa: Cómo se prepara y dónde comprarla en la CDMX

La gastronomía libanesa llegó a México con su comunidad, alrededor de la segunda mitad del siglo XIX, quienes llegaron en una gran emigración desde el Monte Líbano donde se estaba conformando el Imperio Otomano y se marginaba a la población cristiana. Cansados de una economía neofeudalista impuesta por los drusos, la comunidad maronita buscaba alternativas y así fue como decidieron en su mayoría, salir del país.

Algunas de esas embarcaciones provenientes del Medio Oriente llegaron a distintos puntos del continente americano, como Nueva York, La Habana y Veracruz, por lo que una vez en México, los migrantes se trasladaron a Puebla y a la Ciudad de México, lugares donde se concentra la mayor comunidad libanesa. Su gran cultura comenzó a formar parte de la nuestra y su comida empezó a mezclarse con nuestra cocina.

La comida libanesa incluye una abundante cantidad de granos integrales, frutas, verduras, pescados y mariscos frescos y almidones, mientras que las grasas animales no son tan consumidas, pues es más común el uso de aves de corral o la carne de cordero y cabra. Sus preparaciones son con base en aceite de oliva, ajo y limón, además de que los garbanzos y el perejil son alimentos básicos.

Platillos de la comida libanesa

Entre los platillos salados más conocidos se encuentran el hummus, una salsa o untadura hecha con garbanzos mezclados; también destaca  el baba ganush, salsa hecha de berenjena asada al carbón; el faláfel, que son unas tortitas fritas hechas de garbanzos molidos muy condimentados, aunque también los preparan con habas o una combinación de ambos; y el shawarma, un sándwich que se hace carne marinada ensartada en grandes barras, la cual es considerada el origen de la carne al pastor.

En la comida libanesa también se encuentran el tahini de sésamo, que al igual que el hummus se comen típicamente con pan de pita, una especie de tortilla de harina que puede abrirse y que se cocina tradicionalmente en hornos de piedra. Otro preparado muy conocido en la cocina libanesa es el tabule, del cual ya te hemos hablado antes.

Entre los postres son reconocidos el baklava, hecho con capas de pasta filo rellenas de nueces y empapadas en jarabe de dátiles o miel; también están los que se preparan para ocasiones especiales como el meghli, que se sirve regularmente en copas pequeñas y se estila para celebrar un recién nacido en la familia; o los famosos dedos de novia que también cambian de nombre según la región en la que se preparan, por ejemplo, dedos de Zainab, Balah el-Sham o Luqmat el-Qadi.

Entre las bebidas destacan el arak, un licor con sabor a anís que es la bebida nacional libanesa y el vino libanés.

¿Dónde comprarla en la CDMX?

Comprar comida árabe tradicional en México es posible, uno de los lugares más emblemáticos es la panadería Helus en el Centro Histórico de la Ciudad de México; también en esta zona se encuentran los restaurantes Al Andalus, El Edhen, El Jamil y El Rey de la Comida Libanesa; al sur de la ciudad se encuentran La Nueva Libanesa, Don Anuar y Asador Libanés; y al poniente Adonis o Gruta Ehden, como las opciones más sobresalientes.