¿Qué pasa si tengo tos y tomo agua fría? Esto es lo que se sabe

Seguramente alguna vez en la vida escuchaste que si tienes tos o un resfriado debes evitar tomar agua o bebidas frías, pues esto podría empeorar tu estado de salud, pero te has preguntado si ¿esto es verdad? La tos se puede deber a diversas causas, pero regularmente aparece como un reflejo que tiene el organismo para despejar la garganta y las vías respiratorias.

En el caso de la tos y el resfriado, los especialistas aconsejan tomar muchos líquidos para mejorar los síntomas, pero la mayoría tenemos asociado el recuerdo de evitar los líquidos fríos y echamos manos de remedios caseros como tés o infusiones, caldos y cualquier bebida caliente que nos ayude a mejorar los síntomas que dañan las vías respiratorias y mantienen irritada a la garganta.

Tomar agua no sólo ayuda a mantener más libre las vías respiratorias, sino a mejorar la digestión y el metabolismo, eliminar las toxinas y desechos del cuerpo, mantener los órganos y tejidos sanos, pero también a mantener una temperatura corporal normal, cambiando este estado incluso si tomas una bebida fría o una caliente.

¿Qué pasa si tengo tos y tomo agua fría?

En la medicina ayurvédica originaria de la India, se dice que tomar agua fría puede provocar un desequilibrio en el organismo y ralentizar el proceso digestivo, además de que exigiría un gasto mayor de energía para que nuestro cuerpo recupere la temperatura regular, que es de 37 grados Centígrados.

Por otra parte, un estudio realizado en 2013 analizó los efectos de tomar agua a diferentes temperaturas en seis personas deshidratadas tras realizar ejercicio y descubrieron que la temperatura del agua cambiaba la respuesta de sudoración y la cantidad de líquido que se consumía.

En el caso de la rehidratación, los investigadores concluyeron que la mejor temperatura del agua era de 16 grados Centígrados, es decir, fría.

No obstante, otras investigaciones apuntan a que las personas que tienen problemas como la acalasia (trastorno poco frecuente que dificulta el paso de alimentos y líquidos desde el esófago) no deberían tomar agua fría, y por el contrario, tomar agua caliente ayudaba a relajar y calmar el esófago.

Por otra parte, un estudio hecho en 2001 comprobó en 669 mujeres que tomar agua fría estaba relacionado al aumento de la posibilidad de sufrir dolores de cabeza o migraña.

Aparte de esto, hasta ahora no existe evidencia científica que respalde que consumir bebidas o alimentos fríos causen resfriado, tos o dolor de garganta, ¿entonces por qué tanto escándalo con el agua fría?

Lo único que han asegurado los expertos es que el frío debilita las defensas de las vías respiratorias y esto le abre las puertas al virus de la gripa. Asimismo, tomando en cuenta que algunas investigaciones señalan que las bebidas calientes relajan las vías respiratorias, sin duda es mejor tomar agua tibia o caliente que fría.

Fuente: Medical News Today

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