Aprende a preparar unos deliciosos polvorones al limón para las tardes frías

Aunque ya pasaron la Navidad y el Año Nuevo, el olor a galletas siempre nos harán tener un ambiente bien cálido en casa y particularmente en la cocina, un espacio que nos trae muchos recuerdos de nuestra abuelita o donde mamá nos prepara deliciosos bocadillos con tanto amor, que se quedan en nuestra memoria para siempre y que cada vez que hay oportunidad nos gusta recordarlos y para ello no hay mejor opción que cocinar a veces.

La cocina nos conecta con lo que somos y de dónde venimos. La verdad es que nos acerca a nuestros orígenes y lo queramos o no a las recetas familiares, que si no aprendemos a hacer, un día se esfumarán y no queremos eso. Por eso siempre merece la pena que tratemos de practicar una que otra y podemos empezar con las saladas o con lo básico de repostería, que son las recetas de galletas, las cuales hasta los niños pueden hacer. 

Las galletas son bonitos detalles que solemos dar en Navidad, el 14 de febrero o el 10 de mayo, que es el Día de las Madres. Sin embargo, siempre se pueden comer u obsequiar en cualquier momento del año, particularmente cuando hace mucho frío o lluvias, que es cuando se nos antoja mucho un pequeño bocadillo, que no llene tanto, pero que tampoco sea algo tan ligero y la buena noticia es que este postre logra llenarnos ese huequito. 

¿Por qué es buena idea comer galletas?

Lo bueno de las galletas es que no son un bocadillo dulce que nos canse, porque hay un montón de recetas que te pueden sorprender por su increíble sabor. Ahí tienes por ejemplo la de polvorones al limón, que hoy te enseñaremos a preparar, porque básicamente es deliciosa y no se necesitan de muchos pretextos para que te pongas a hacerla. Además, recuerda que siempre puedes sorprender a tus seres queridos con algo así y te lo agradecerán. 

Ok, ok, sabemos que este tiene pinta de un postre navideño, pero técnicamente aún no termina Navidad, porque todavía falta que lleguen los 3 Reyes Magos a adorar y dejar obsequios al niño Dios, de acuerdo con la Biblia, que no dice particularmente que fue el 6 de enero, pero tampoco dice que fue por febrero, así que sí cuentan como navideñas estas fiestas y comilonas especiales, donde nos reunimos con la familia para convivir. 

Así que no sientas culpa, porque siempre puedes empezar esa dieta el 7 de enero. Recuerda que más allá de la fecha, lo que verdaderamente importa es el compromiso que tú hagas contigo mismo de lo mucho que quieres avanzar en tu dieta del año para bajar de peso, pero una o 2 galletitas al día no hacen mucho daño. ¡Tú siéntete con toda la libertad de comer lo que quieras, porque además el clima está como para complacernos! 

Ingredientes

• 150 gramos de harina
• 75 gramos de azúcar glass
• 50 gramos de almendras molidas 
• Esencia de limón o ralladura de la cáscara de limón

¿Cómo se preparan?

1. Mezcla en un bowl la harina con la almendra molida y una vez esté todo bien integrado, coloca en una bandeja y mete en el horno precalentado a 160 grados Celsius.
2. Remueve para que todo quede bien tostado por igual y una vez el color haya cambiado, retira del horno y coloca en una bandeja mientras enfría. Reserva.
3. Coloca la manteca de cerdo junto con la azúcar glass y un par de gotas de esencia de limón. Esto último es al gusto.
4. Mezcla hasta conseguir una consistencia cremosa y cuando ya lo logres, agrega harina y sigue removiendo hasta que tengas una mezcla homogénea. Forma una bolita y tapa con papel film para después dejar esto en la nevera por 30 minutos.
5. Una vez se cumpla este tiempo, estira la masa con un rodillo en una superficie enharinada. Cuando ya esté listo todo, utiliza el cortador de tu gusto para dar forma a los polvorones.
6. Si no tienes un molde, pues usa la boca de un vaso para cortar tus polvorones, los cuales deberás dejar en una bandeja con papel para hornear. Cuando esté todo listo coloca en el horno por 20 minutos a una temperatura de 170 grados Celsius.
7. Saca del horno los polvorones y espera a que enfríen para espolvorear el azúcar glass.
8. ¡Listo!