receta de postres

Aprende a preparar unos deliciosos mandazi o bollitos africanos con esta receta

Pueden ser una buena opción para comer las tardes lluviosas o los días fríos
martes, 18 de mayo de 2021 · 12:51

Hablar de comida africana no es tan común como lo es hacerlo de la italiana, la francesa o la china. Su diferencia es continental en más de un sentido y aunque no lo creas su influencia es innegable y notoria incluso en algunas recetas de la comida mexicana. Esta gastronomía es un conjunto de artes y costumbres culinarias que tiene la gente las etnias que componen el continente africano, es decir el tercero en tamaño de la Tierra que aloja a cientos de grupos sociales.

 La diversidad se refleja también en su cocina, ingredientes y técnicas empleadas para cocinar. De hecho está poderosamente influenciada por el norte de la región mediterránea y del noroeste de las cocinas árabe y turca. Además, por regla general, la principal comida de los africanos consiste en una mezcla de verduraslegumbres y en algunas ocasiones carne, porque esta última es demasiado cara para los habitantes.

Cuando se come carne, puede ser de cualquier animal silvestre, porque las carnes de vaca, oveja y cabra son consideradas un lujo, debido a su precio tan alto. La combinación de diversos alimentos se suele denominar estofado, sopa o salsa dependiendo de la región. La mezcla de alimentos se suele servir en una especie de porridge o puré elaborado con raíces de plantas tales como la cassava o de cereales como el maíz, mijo o incluso arroz.

Postres africanos, un tesoro escondido

Pero además de la dieta africana que consiste en verduras y carne, la repostería también tiene lo suyo y su influencia ha llegado a diferentes zonas de América, como Puerto Rico, el Caribe, Brasil, Colombia y hasta algunos platillos en el sur de Estados Unidos. Y  ahora sí que si no se habla mucho de la cocina salada, menos de la repostería. Sin embargo no hay por qué no darles la visibilidad que se merece, pues tiene postres auténticamente deliciosos. 

Uno de esos postres que nos ganan desde la primer mordida, son los exquisitos Mandazi, que son una especie de pastelitos o bollos con sabor a coco. Lo fantástico de ellos  es que son semi-dulces, un término excelso para aquellos que no aman el chantilly. Son originarios de Kenia y Tanzania. Sin embargo, se han expandido por todo el continente. Algunos creen que son similares a los buñuelos españoles, pero esponjosos y suaves. 

Y para que te los dejes de imaginar, hoy traemos para ti esta fabulosa receta del postre africano y uno de los más suaves y casuales que tienen en sus recetarios. Así que prepárate para sabores nuevos o quizá algo familiares, pero de lo que estamos seguros es que estos pastelitos van a conquistar tu paladar, como ningún otro postre. Pueden ser una buena opción para comer las tardes lluviosas o los días fríos. 

Ingredientes

  • 300 gr. de harina
  • 1/2 taza de coco rallado
  • 2 cucharaditas de levadura en polvo
  • 50 gr. de azúcar
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 1/2 cucharadita de cardamomo molido
  • 1/2 cucharadita de canela en polvo
  • 1/4 de taza de agua mineral tibia
  • 125 ml. de leche de coco
  • 1 huevo
  • Aceite de oliva (para freír
  • Azúcar glass

¿Cómo se prepara?

  1. En un recipiente grande, pon la harina, el coco rallado, la levadura. La sal. colócala en el extremo opuesto a la levadura para evitar el contacto, el cardamomo y la canela en polvo.
  2. Añade el agua mineral, la leche de coco y el huevo batido. Amásala con las manos, durante 10 minutos. Si vemos que la mezcla es muy ligera, añádele harina. El resultado de la masa debe ser lisa, elástica, pero no pegajosa.
  3. Forma una bola con la masa y úntala con un poco de aceite de oliva. Déjala reposar en un bol aceitado, durante un mínimo de 2 horas, en una zona caliente.
  4. Coloca la masa sobre la superficie de trabajo enharinada, y vuélvela a amasar unos 5 minutos más.
  5. Divídela en 8 partes iguales, formando bolas cada una de ellas.
  6. Aplástala formando un círculo y córtalo en 6 triángulos, cada uno de ellos. Deja que reposen tapados, durante 15 minutos.
  7. En una sartén honda con abundante aceite caliente, fríelos por tandas. 2 minutos por cada lado, hasta que estén ligeramente dorados.
  8. Déjalos sobre papel absorbente, para eliminar el exceso de aceite.
  9. Aun calientes, espolvoréalos con el azúcar glas.