Huerto en casa
Huerto en casa: te damos el paso a paso para que cultives tu propio melón de forma sencilla
Frutas frescas son posibles con un poco de paciencia y mucha dedicación para mejorar nuestros platillosEl melón es una de las frutas más jugosas y coloridas que podemos encontrar en el mercado, con el cual se pueden elaborar helados, aguas frescas, ensaladas o postres dulces que dejan a más de uno con la boca abierta. Una de sus mejores temporadas en la que lo podemos encontrar en el mercado es entre los meses de mayo a septiembre, ya que se trata de una fruta típica del verano y el clima cálido.
Ahora que si queremos cultivarlo en casa la mejor temporada para hacerlo es en primavera ya que al ser una planta de tierra caliente necesita de los rayos del sol y una temperatura adecuada para poder germinar de la forma correcta. Así que estamos justo a tiempo de poder comenzar con su cultivo, e incluso hay quienes logran cultivar el melón en temporadas invernales, siempre y cuando se cuenten con el espacio y las condiciones de calor, como en un invernadero.
Cómo cultivar melón en casa
Las semillas
Las semillas del melón son la base para comenzar con el cultivo, así que puedes aprovechar el melón que compraste y reservar todas sus semillas. Una vez que las tengas es necesario que las laves muy bien para eliminar todo el exceso de jugo que puedan tener y dejarlas escurrir muy bien.
Germinado
Una vez que tus semillas están limpias distribuye por una superficie húmeda como un trapo limpio que ya no estés utilizando. Recuerda que debes separar todas las semillas para que no se encimen y el proceso se puede realizar de forma más sencilla. Con un spray, rocía las semillas de forma diaria, pero recuerda que es solo para mantenerlas húmedas así que no añadas agua de más. En un periodo de entre siete y diez días, verás cómo las semillas comienzan a germinar, es decir, sobresalen pequeños brotes de las mismas.
Planta
Una vez que las semillas han germinado es hora de plantarlas en una maceta pequeña la cual tenga un agujero en el fondo que permita un buen drenaje, así como suficiente tierra y un sustrato con nutrientes (lo puedes comprar en los sitos donde venden macetas y flores). Coloca las semillas no muy profundas, que la tierra las cubra en unos 4 o 5 centímetros. Coloca tu planta en un lugar fresco donde el sol pueda pegar por un rato durante las mañanas.
OJO: Recuerda regar al menos 3 veces por semana para que la tierra se mantenga húmeda y tibia.
Siembra
Un par de semanas después verás como comienzan a crecer los primeros brotes de tu melón, de los cuales se desprenderán pares de horas verdes, lo que quiere decir que están listas para ser sembradas en un espacio más amplio. Prepara la zona en la que vas a transplantar tu planta y con cuidado de no romper las raíces coloca en una zona donde pueda recibir algunos rayos del sol durante el día, ya que se trata de una planta de tierra caliente.
Una vez que hayas terminado de sembrar, cubre con abundante agua para que comience a adaptarse a su nuevo ambiente. Después de eso solo deberás regar de dos a tres veces por semana para que la tierra no se seque por completo y pueda obtener todos los nutrientes del sol. En un par de meses verás como la planta comienza a dar sus primeros frutos y podrás disfrutar de tu buen trabajo.