¿Qué es mejor, una pechuga preparada en casa o unos nuggets? Esto dice Profeco

La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) presentó un comparativo nutricional entre una pechuga de pollo preparada en casa y unos nuggets de pollo preparados en una cadena de comida rápida y los resultados son sorprendentes respecto a las diferencias en los aportes calóricos y nutricionales.

Con el objetivo de alentar a la ciudadanía a consumir alimentos naturales y preparados en casa para cuidar la alimentación y la salud de las familias mexicanas, la Profeco señaló que 100 gramos de pechuga a la plancha son mucho menos calóricos que 100 gramos de nuggets de venta comercial, lo que en primera instancia puede modificar la salud y la complexión de una persona.

Esto resulta relevante debido a que los nuggets de pollo no sólo son un tipo de comida rápida muy gustada por los mexicanos, sino que es un alimento que regularmente se prepara a los niños como parte de una comida supuestamente más nutritiva debido a que se trata de una carne con un buen contenido protéico, poca grasa y de mejor digestión, aunque esto no es lo que dice la dependencia.

¿Qué es mejor, una pechuga casera o unos nuggets comerciales?

En el comparativo podemos ver los siguientes valores nutricionales:

Pechuga de Pollo casera

• Contenido energético: 160 kcal
• Proteínas: 28.8 gramos
• Grasa: 4 gramos
• Carbohidratos: 0 gramos
• Sodio: 65.2 mg /100 gramos

Nuggets de Pollo de cadena de comida rápida

• Contenido energético: 297-371 kcal
• Proteínas: 13.92-17.74 gramos
• Grasa: 16.96-24 gramos
• Carbohidratos: 18.38-23.49 gramos
• Sodio: 448-698 miligramos por cada 100 gramos

¿Esto qué significa? En primer lugar que los nuggets de pollo de cadena aportan más del doble de calorías, lo que implica una gran cantidad de energía que el organismo tendría que aprovechar diariamente o de lo contrario se empieza a acumular en forma de grasa en las arterias y por supuesto, en sobrepeso.

Por otra parte, de esta cantidad calórica la pechuga de casa aporta más del doble de proteína que los nuggets y una cuarta parte de grasa, mientras que en el aporte de carbohidratos su cantidad es de cero comparada a los casi 24 gramos que puede aportar un nugget de pollo preparado por una cadena comercial.

Traducido al español como dirían algunos, significa que la pechuga de pollo es el producto con más carne y menos grasa de los dos, por lo que su contenido energético se puede aprovechar mejor para reparar y fortalecer los músculos, lo que implica un menor desgaste de los riñones, del hígado y menor probabilidad de sobrepeso, obesidad, enfermedades metabólicas y cardiovasculares.

En tanto, los nuggets además aportan una gran cantidad de carbohidratos y grasas debido al pan molido con el que se empanizan, sino también a que se fríen en aceites comerciales, algunos de ellos grasas trans que son los peores para la salud, sin contar con que mucha de la carne que se usa se muele con desechos del pollo como la grasa y el pellejo.

A esto se suma un excedente de sodio en los nuggets, más de 7 veces de lo que aporta una pechuga de pollo hecha en casa, lo que a la larga podría afectar la presión arterial, aumentar el riesgo de sufrir un ataque cardiaco o un derrame cerebral.

Sin duda, tener información nutricional de los alimentos para optar por una u otra opción es fundamental para cuidar la salud.