Prepara un delicioso pan de vino en casa y ponle un toque especial a tus sándwiches

Preparar tu propio pan en casa tiene muchas ventajas, desde disfrutar de un delicioso plato totalmente casero, como sándwiches y bocadillos, hasta lograr el pan perfecto con tus sabores y texturas favoritas, por eso esta vez te enseñaremos a preparar un rico pan de vino tinto que llevará al siguiente nivel todas tus preparaciones. 

Para esta receta te recomendamos que utilices harina de fuerza combinada con la harina de trigo estándar, así tu pan obtendrá una textura inigualable, esto gracias a que la harina de fuerza contiene una cantidad de gluten mayor, no obstante, si no la consigues puedes sustituirla fácilmente con harina de trigo, añadiendo una taza de harina estándar, más una cucharada extra, por cada taza de harina de fuerza que indica la receta. 

Pan de vino tinto

Ingredientes

• 225 gramos de Harina de trigo
• 150 gramos de Harina de fuerza
• 110 gramos de Agua
• 180 gramos de Vino tinto a temperatura ambiente
• 11 gramos de Levadura instantánea
• 1/2 cucharadita de Sal

Comienza mezclando la harina junto con el agua, la harina de fuerza, la sal, la levadura y el vino, deja que todos estos ingredientes se integren y tapa el recipiente dónde tengas está masa, tapa con un paño, deja reposar por 30 minutos y después extiéndela y vuelve a amasar por 10 minutos, una vez lista vuelve a tapar con el paño y deja reposar por 30 minutos más, deberás repetir el proceso de reposo y amasado 3 veces más hasta que obtengas una masa lisa y suave, en este punto forma una bola con la masa y dejar reposar hasta que doble su tamaño. 

Cuando tu masa haya fermentado, extiende y dobla los extremos hacia el centro, voltea y vuelve a extender repitiendo el doblez, pero esta vez sellando los extremos al centro de la masa, una vez formada tu hogaza, coloca en un recipiente o cesto de fermentación con un paño en el fondo, hasta que vuelva a doblar su tamaño, después de este tiempo pasa a una charola con harina y lleva a hornear a un horno precalentado a 230° grados, rocía un poco de agua con un atomizador para crear humedad en el interior de tu horno, cocina por 50 minutos y cuando el pan este dorado retira del horno y deja enfriar.