Para cualquier ocasión especial, receta para preparar un delicioso mostachón de fresa

Los postres son el momento cumbre de cualquier comida o cena, es donde se da un cierre con broche de oro al evento.Y es que en gustos se rompen géneros y en los postres tampoco es la excepción, por esa razón el día de hoy te traigo un postre sumamente delicioso, clásico, atemporal y sencillo. 

Estamos hablando del mostachón, que consta de una base crujiente pero suave a base de nueces  y merengue, algo así como un macarrón pero no es igual. A esta base delicada la precede una crema dulce que contrasta en todos los sentidos con la fruta ácida que es la fresa.

Y si ya se te antojo, déjame enseñarte la receta que será de lo más sencillo y seguro, cuando la prepares quedarás como todo un chef.

Ingredientes:

• 5 claras de huevo
• 1 paquete de galletas de mantequilla 
• 1 taza de azúcar
• 1 taza de nueces
• 1 cucharadita de vainilla
• 1 cucharadita de polvo de hornear
• 1/8 cucharadita de cremor tártaro
• 1 pizca de sal
• 1 taza de crema para batir
• 1 taza de azúcar glas
• 1/4 de taza de nata ligera
• 225 gramos de queso crema
• 1 cucharadita de vainilla
• Fresas o la fruta de nuestra preferencia

Procedimiento:

Precalentamos el horno a 180 grados mientras preparamos la base.

En un recipiente completamente seco añadimos las claras de huevo, el cremor tártaro y la sal. Batimos hasta que aumenten su volumen y estén blancas.

Sin dejar de batir agregamos el polvo de hornear y el azúcar. Batimos hasta que tengamos un merengue brillante y firme.

Trituramos las galletas y troceamos las nueces. Con la ayuda de una espátula incorporamos a la mezcla junto con la vainilla. Mezclamos con movimientos envolventes.

Engrasamos el molde que vamos a utilizar. Vertemos la mezcla y horneamos durante 40 minutos o hasta que comience a dorarse.

Pasado ese tiempo retiramos del horno, dejamos enfriar y desmoldamos. Colocamos en un plato grande y reservamos.

Para la nata montada utilizamos un recipiente amplio. Batimos la crema hasta formar picos.

En un recipiente aparte mezclamos el queso crema, crema para batir  ligera, la vainilla y el azúcar glas. Batimos hasta obtener una mezcla esponjosa y suave.

A continuación, incluimos la crema batida a esta mezcla con movimientos envolventes. Cuando los ingredientes estén completamente integrados reservamos en el refrigerador durante unos minutos.

Por encima de la base del mostachón esparcimos la crema montada con cuidado y ordenamos la fruta como nos guste.