¡SIN HORNO! Disfruta de este delicioso bizcocho de VAINILLA

Uno de los postres más populares y deliciosos, sin duda esos son los bizcochos, no importa cuál sea su presentación, resultan ser de las recetas más consumidas por todos. Pese a que son realmente ricos, el problema del bizcocho llega cuando lo queremos hacer y descubrimos que en alguna receta encontramos la palabra HORNO y automáticamente se nos van todas las ganas de disfrutar este delicioso postre, de manera casera. Pero eso no debería ser motivo para que no lo disfrutes, porque hoy en día existen muchas formas, afortunadamente, de poder hacer esta receta, sin necesidad de utilizar el temido: horno. 

Ahora, hablando un poco más del bizcocho, la palabra como tal proviene del latín: bis coctus que significa cocido dos veces. Su preparación es sumamente antigua, incluso se cree que hay pruebas donde ya existía desde la época de los faraones como Ramsés, así es, estamos hablando del siglo X a. de C. De esto, aún tenemos algunas dudas, pero de acuerdo a varios antropólogos, en las pinturas se aprecia el bizcocho y nosotros no podemos más que agradecerles por ello. 

¿Doble cocción?

Precisamente, como el nombre lo indica, la doble cocción a la que es sometido el bizcocho, ojo no es de manera literal. Para tener esta "doble" es porque se deja un tiempo mas después de lo que marcan varias recetas, para reposar. Esto, de acuerdo a la preparación original, es porque ayudará a conservar mucho mejor nuestro bizcocho y lo hará por mucho más tiempo, por lo tanto estaría aprovechando por muchos más días de lo que se tenía contemplado. La parte de la conservación, también nace, porque existe la creencia que era uno de los alimentos que se les daba a los soldado y navegantes, para soportar los largos caminos hasta su siguiente destino. 

Actualmente existen muchas versiones del bizcocho, esto a raíz de que se fue popularizando en todo el mundo, algunos de los más mencionados o reconocidos son las mantecadas, los bizcotelas, los sobaos, rellenos de Bergara, soletillas, etc. En México, el famoso bizcocho tomó tanta fuerza, que podríamos decir que no solo existe la versión de mantequilla o vainilla, hay recetas inspiradas en este que son de sabores como naranja, chocolate, piña y eso por mencionar algunos. Por supuesto la versión que traemos el día de hoy es de vainilla y, lo mejor, ¡SIN HORNO! Sin nada más que agregar, vamos con el bizcocho de vainilla. 

Bizcocho de vainilla 

Ingredientes

• 1 Tza. de harina
• 3/4 Tza. de azúcar
• 3 Cdas. polvo de hornear
• 6 Huevos (Separar Claras y Yemas)
• 3 Cdas. de vainilla
• 3 Cdas. de aceite
• 5 Cdas. de leche
• 1 Pzca. de sal

Preparación 

Lo primero que haremos será mezclar las yemas con la vainilla, el aceite y la mitad del azúcar.

Añadimos al a mezcla la harina, el polvo de hornear y la pizca de sal. Estos deberán estar previamente tamizados. Incorporamos la leche seguimos mezclando muy bien.

La masa va quedar un poco dura pero no pasa nada, no te espantes.

Vamos a batir las claras y cuando esta un poco débil el merengue agregamos el azúcar hasta formar puntos de nieve. 

Agregamos una cucharada de las claras a la primer mezcla y removemos para que la masa quede más suave, de ahí en adelante se agrega en forma envolvente poco a poco la mezcla.

En el molde con mantequilla, vamos a poner la mezcla.

OJO la mantequilla la ponemos con papel y solo en el fondo, no se unta de mantequilla,  ni se enharina los lados del molde.

Tapamos muy bien con papel aluminio y llevamos a baño maría a fuego medio alto.

Dejamos por 50 minutos y para comprobar que está listo, hacemos la prueba del palillo. Pasado el tiempo dejamos enfriar a temperatura ambiente. 

Desmoldamos y listo. 

Puedes poner azúcar glass por encima para su presentación.