Prepara una cremosa gelatina de fresa con sólo 3 ingredientes

La gelatina es un postre delicioso y muy sencillo de preparar, aunque la alta repostería ha presentado platillos impresionantes con una elaboración cada vez más compleja, por lo que consumir una simple gelatina de sabor nos parece insignificante o aburrido, así que en esta ocasión te damos una opción para variar su presentación y hacerla más atractiva con sólo tres ingredientes, aunado a que su preparación es muy sencilla.

Aunque a veces llegamos a despreciar la gelatina, consumirla trae muchos beneficios a la salud, ya que es una buena fuente de proteínas, pues quizá no lo sabías pero se obtiene a través de la hidrólisis parcial del colágeno extraído de la piel, el hueso y otras partes del ganado vacuno, porcino, equino y avícola, las cuales son trituradas y hervidas para obtener la grenetina, compuesto básico de la gelatina.

Es interesante saber que la grenetina no tiene sabor ni olor, mientras que su consistencia movediza, como la de un gel, es el cuarto estado de la materia; por ello, a la gelatina industrial se le agrega el sabor aparte y así la encontramos en bolsitas de polvos con sabor mango, limón, anís, uva, naranja, fresa, coco, etcétera, cuya preparación no nos lleva más de 15 a 20 minutos.

Entre otros beneficios, la gelatina también está conformada por sales minerales y agua, por lo que su consumo nos proporciona hidratación, así como aminoácidos, en especial la glicina, que ayuda a la reparación de los tejidos y tiene un efecto antiinflamatorio, por lo que es muy recomendable su consumo para personas que tienen problemas en las articulaciones, además de que mejora el aspecto de la piel y el crecimiento de las uñas y el pelo.

Sin ahondar más en las razones positivas de comer gelatina, te invitamos a que prepares esta deliciosa receta y te llenes de sus beneficios con esta presentación que te resultará muy atractiva.

Cremosa gelatina de fresas

Ingredientes:

Gelatina de fresas

1 Lata de leche condensada (300 gramos)

1 Lata de crema agria (200 gramos)

En un recipiente hondo coloca 300 mililitros de agua caliente y verte la gelatina de fresa, remueve hasta desintegrar bien los granos de la grenetina, enseguida añade 300 mililitros de agua fría para que se enfríe. Por otra parte, licúa la leche condensada y la crema agria hasta obtener una mezcla homogénea y pasa este licuado a la gelatina removiendo hasta que todo quede bien integrado y después sírvelo en los recipientes donde vayas a servir la gelatina y mételos al refrigerador. Deja ahí hasta que esté bien cuajado y sirve fresco, puedes adornar con fresas frescas.