Tips de cocina
7 consejos para hacer una tabla de quesos como un experto
Sorprende a tus invitados con sabores y texturas únicas que seguro se volverán la atracción de la nocheSi después de varios meses de encierro por fin te estás preparando para hacer una pequeña reunión en casa, seguro ya estás organizando todos los preparativos como bebidas y los bocadillos que vas a ofrecer en esta ocasión. En este sentido, las tablas de queso puede que sean una muy buena opción para recibir a tus invitados, ya que se llevan muy bien con una copa de vino y se ven muy elegantes en donde se coloquen sin importar la ocasión.
Así como la vajillas y los cubiertos llevan un orden para resaltar en la mesa, las tablas de queso también deben ser elaboradas con esmero y pensando en nuestros invitados o sus gustos específicos. Texturas, aromas, colores y sabores se deben combinar a la perfección para que comiences a darle variedad a tu mesa, pero sobre todo que dejes fluir tu imaginación ya que no hay reglas estrictas que debas seguir.
¿Cómo hacer una tabla de quesos?
La ocasión
Lo primero que debes tener en claro es la ocasión para la que vas a preparar una tabla de quesos, ya que no es lo mismo una cena informal con amigos que buscan un bocadillo para picotear, que una entrada formal para una cena mucho más elaborada. En el primer caso, es necesario que uses más quesos, ya que no hay nada más después de este picoteo, y en la segunda no quieres llenar a tus invitados con estos productos si vas a servir una gran cena.
La cantidad
Una vez que ya tienes claro si se trata de una cena completa o solo una tarde de plática con los amigos, es hora de calcular las porciones. En el caso de que se trate de una reunión acompañada de una gran cena, se estiman entre 50 y 150 gr de queso por comensal, esto ayudará a abrir el apetito y no opacar tus platillos principales. Ahora que si solo la tabla de quesos va a ocupar un espacio completo, tendrás que calcular entre los 150 gr y hasta 200 gr por comensal.
Cantidad de quesos
En el supermercado vas a encontrar una gran variedad de quesos entre los que podrás escoger por lo que podría ser un poco agobiante pensar en cada uno de ellos. Lo que debes tomar en cuenta es no comprar productos solo porque sí, ya que esto solo representará un gasto excesivo y hasta puede que tus invitados decidan no probarlos todos, así que no compres productos de más.
Lo más recomendable es que uses como mínimo 4 variedades de queso distintas y tengas un límite de hasta 8 diferentes, dependiendo la cantidad de comensales y el tipo de reunión que tengas planeada, pues es posible que no todos tus invitados se animen a probar los quesos. Ya sea que intentes con queso nacionales o internacionales, la decisión será tuya.
Tipos de queso
Lo interesante de una tabla de queso es la variedad de productos de los que se puede sacar provecho, así que toma en cuenta el tipo de animal del que proviene la leche como cabra, vaca, ovejas, entre otros. Los tipos de textura entre suaves, untables y de pasta dura; tipos de corteza ya sea con hierbas o enmohecida; maduración e intensidad de sabor, ya sean quesos tiernos con un sabor muy suave o muy añejos con sabores mucho más pronunciados. Y por último no te olvides de su región de origen, así tus invitados podrán probar quesos de diferentes puntos del mundo.
De menos a más
El éxito de una buena tabla de quesos es que sepas guiar a tus invitados por sus sabores, partiendo por los quesos más suaves de textura y sabor, hasta terminar con aquellos más especiados o añejos, esto ayudará a que el paladar se acostumbre poco a poco a los sabores en lugar de probar de golpe un queso con un sabor muy fuerte que haga que los invitados rechacen probar el siguiente tipo de queso.
El corte y la presentación
Cada tipo de queso requiere de un corte específico para ser presentado, así como cuidados de refrigeración o no someterlos a temperaturas más bajas. Lo mejor en este caso es pedir ayuda en la tienda especializada donde adquieras tus quesos, ya que cuentan con expertos en el tema que podrán ayudarte a conocer el tipo de corte perfecto y los cuidados que debes tener con cada uno de los quesos.
Ten en cuenta que la presentación será indispensable, así que utiliza una tabla de madera en buen estado y que sea diseñada para este tipo de evento, ya que no es lo mismo usar una tabla para picar verduras que una para ofrecer quesos. Para su acomodo, lo más usual es hacerlo siguiendo las agujas del reloj, poniendo en primer lugar los quesos suaves y al final los fuertes. Si usas una tabla rectangular, hazlo de la misma forma solo que ordena tus quesos en fila.
Sus acompañamientos
Nada sería lo mismo si solo sirves el queso sin una fruta o un crujiente que le diera ese toque final. Por ejemplo, si usas quesos de textura suave que se pueda untar, puedes recurrir a galletas saladas; si son quesos suaves que se pueden cortar en láminas, opta por panes; mermeladas caseras o compotas si son quesos de sabores suaves, así como frutas frescas o dulces confitados que se llevan bien con casi cualquier tipo de queso.
También puedes hacer uso de frutos secos, aceitunas, pepinillos o encurtidos, recuerda que todo dependerá del tipo de queso y la ocasión para los que sean servidos, así como tus gustos y los de tus comensales. Puedes jugar con todos los sabores y texturas para armar tu tabla de queso como más te guste.