¿Cómo saber si el pescado del mercado es fresco? Checa estos tips

Con la llegada de la temporada de cuaresma y las primeras señales de la primavera, seguro quieres algo muy fresco para comer en estas fechas. Los pescados forman parte esencial de la época de calor, ya que además de ser deliciosos se puede preparar una gran cantidad de alimentos de forma sencilla para que te sientas como en la playa con los mejores sabores del mar. 

Es por esto que si vas a comprar pescados frescos para disfrutar en familia, debes aprender a identificar los productos más frescos, ya que esto te ayudará a reducir riesgos de tener algún malestar por su consumo e incluso tener que tirarlos al llegar a casa y darnos cuenta que no están tan frescos como lo prometieron o nos lo hicieron creer. 

Cómo identificar un pescado fresco

Antes de que comiences a hacer tus compras para esta temporada de cuaresma, es mejor que tomes nota sobre cuáles son los principales signos de frescura que debes tener en cuenta para hacer una preparación perfecta y que sorprendas a todos con los mejores platillos que puedas encontrar. 

Carne firme

Cuando vayas a comprar pescados no tengas miedo de tocar -puedes hacerlo con guantes-, ya que la firmeza de la carne así como su color brillante serán una buena señala de que podrás llevar a casa pescado fresco. Con la punta de los dedos presiona ligeramente la carne del pescado, esta debe volver a su lugar, lo que significa es se trata de un producto en buen estado.

Ojos brillantes

Uno de los signos por lo que se puede saber la frescura del pescado es por sus ojos, ya que estos deben verse de forma perfecta sin opacidades e incluso tienen que sobresalir un poco. Si por el contrario los ojos del pescado están aunque sea ligeramente hundidos u opacos, es mejor que sigas buscando más opciones.

Agallas rosadas

Justo debajo de la cabeza se encuentran las agallas del pescado, así que solo tienes que levantar con el dedo ligeramente para verificar su color. La frescura de un pescado se determina cuando las agallas tienen un color rojo intenso o rosado, ya que es un signo de un pescado muy fresco como recién salido del mar o uno que fue cuidado en su transportación hasta el lugar de venta. Si las agallas son de color café o algo oscuras es un pescado que ya no se puede consumir. 

Escamas

Al tocar un pescado y pasar los dedos ligeramente por la superficie, las escamas deben quedar intactas, es decir, adheridas a la piel, un signo de frescura en el pescado, sin embargo, en ocasiones estas se desprenden con facilidad o ya tienen algunos rastros faltantes. 

Olor a mar

Contrario a la creencia popular el pescado no debe olor a pescado, ya que un pescado en buen estado debe oler a mar y algas, con ese toque salino que caracteriza a la playa. El olor es uno de los puntos clave que te dirán si un pescado está fresco, pues si tiene un olor a rancio o de plano podrido es mejor que ni lo lleves a casa.