Saludable

Así afecta el consumo excesivo de alcohol a tu memoria

El consumo excesivo del alcohol tiene varios efectos adversos, pero tu memoria se ve afectada a corto y largo plazo
martes, 7 de septiembre de 2021 · 12:38

Celebrar y tomarse una copa de vez en vez no tiene nada de malo, e incluso alguna borrachera no es aconsejable, aunque tampoco resulta tan perjudicial, pero ¿sabes lo que pasa cuando te excedes y además lo haces de forma prolongada? Si bien hay varios efectos adversos, en este artículo nos enfocaremos en contarte cómo afecta el consumo excesivo de alcohol a tu memoria.

Uno de los efectos más visibles se aprecia en el sistema nervioso central, lo cual se debe a que el alcohol es capaz de atravesar la barrera hemoencefálica en un 90%, lo que a su vez causa una alteración en la corteza cerebral. Esto implica que haya una sedación leve, como resultado de la depresión de áreas cerebrales responsables de los mecanismos inhibidores.

Esta afectación se origina por una alteración en la corteza cerebral, la cual se ve afectada por el consumo excesivo y regular del alcohol. Los especialistas también han señalado que durante los últimos años de la adolescencia se produce un gran incremento de la materia gris en el cerebro y el desarrollo de áreas asociadas a la memoria, que con el consumo del alcohol son las más afectadas.

¿Cómo afecta el consumo excesivo de alcohol en la memoria?

En primer lugar, ocurre la deshidratación por el consumo excesivo de alcohol, lo que podría desencadenar algunos síntomas como pérdida de la memoria a corto plazo, falta de concentración y poca habilidad para completar las tareas.

Esto se debe un poco a las propiedades sedantes del alcohol, las cuales tienen un efecto anestésico en el cerebro, lo que disminuye su actividad, lo cual favorece la inhibición sináptica producida por transmisor denominado ácido gamma-aminobutírico (GABA), como pasa con drogas como barbitúricos o anfetaminas.

Esta acción inhibitoria actúa en los receptores NMDA del neurotransmisor glutamato, que tiene un poder exitatorio en el cerebro, lo cual produce modificaciones en el mecanismo neuronal del hipocampo y córtex, posibles causantes de los correlatos neuroquímicos de la memoria y base de sus efectos anestésicos.

No obstante, en periodos más prolongados de consumo, los especialistas señalan que el alcohol inhibe la liberación de oxitocina, vasopresina y otros péptidos hipotalámicos, mismos que tienen efectos sobre la memoria, el aprendizaje y otras formas elevadas de comportamiento.

De ahí, que el consumo excesivo del alcohol cause "una disfunción aguda y crónica del cerebro, produciendo trastornos en el sistema nervioso central. Tanto la forma aguda como la crónica provocan alteraciones en la memoria y en las funciones intelectuales complejas (cálculo, comprensión y aprendizaje), además de alteraciones del juicio y la afectividad".

De acuerdo con un estudio, el síndrome alcohólico cerebral crónico consiste en un estado de demencia que se debe a la pérdida acelerada de neuronas, pues si bien este proceso es natural conforme envejecemos, el exceso de alcohol acelera esa pérdida, produciendo una alteración en la capacidad de adaptación.

Asimismo, los especialistas explican que puede derivar en una enfermedad denominada Psicosis de Korsakoff, la cual se caracteriza por una pérdida grave de la memoria reciente, por lo que el paciente es incapaz de retener datos por algunos segundos, acepta cualquier idea que se le sugiera, presenta poca capacidad de juicio o intuición para reconocer la credibilidad o rellena con confabulaciones los espacios de amnesia que tiene en la memoria reciente.

Sin duda, todos argumentos para evitar el consumo excesivo del alcohol, el cual es responsable de muchas muertes en el mundo y problemas de salud pública que nos afectan como individuos y como sociedad.