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¿Cómo hacer un pan casero con masa madre? Sigue paso a paso esta receta

La masa madre es la combinación de levaduras presentes de forma natural que se encargan de la fermentación y consistencia del pan
jueves, 8 de julio de 2021 · 10:59

Cuando escuches hablar de un pan con masa madre, ten por seguro que es uno de gran calidad. La masa madre se define como un cultivo simbiótico en el cual, las levaduras presentes de manera natural en alimentos y cereales, son las responsables de la fermentación. En el caso del pan, antes de que existiera la levadura comercial se utilizaba esta mezcla de masa madre.

Para obtenerla se integra harina con agua y se espera a que empiece a fermentar, después se mantiene "viva" alimentándola con más harina y agua, y para dejarlas en un estado pasivo o "adormecidas" se conserva a bajas temperaturas. Para esta receta de pan casero con masa madre notarás que ya se pide la masa fermentada y esta se puede comprar en cualquier panadería.

Si te preguntas por qué se requiere de este cultivo de levaduras si de hecho se trata de hacer un pan con masa madre, es porque éste no siempre se sabe elaborar bien y al ser fermentado se debe tener cuidado con las cantidades que se agregan y la temperatura y condiciones de almacenamiento. Prepara esta delicia y sorpréndete de lo increíble que queda este pan casero.

Pan casero con masa madre

Ingredientes para el pre-fermento:

  • 60 gramos de harina de trigo 000
  • 40 mL de agua tibia
  • 30 gramos de masa madre

Ingredientes para el pan:

  • 500 gramos de harina de trigo 000
  • 300 mL de agua
  • 10 gramos de sal
  • 100 gramos de masa madre activa

Se empieza con el pre-fermentado o la masa activa. En un recipiente con tapa coloca la masa madre y el agua, mezcla para desintegrar y enseguida añade la harina de trigo 000 hasta obtener una masa homogénea.

Tapa y deja cerca de una fuente de calor hasta que duplique su tamaño.

Es momento de hacer el pan. Pasado este tiempo, coloca en un tazón grande la masa madre activa, es decir, el pre-fermentado, con el agua y mezcla hasta disolver, enseguida añade la sal y la harina de trigo 000, mezcla para integrar. Tapa con un trapo limpio de algodón y deja reposar por una hora.

Después de ese tiempo comienza a amasar, deberás remover de las orillas hacia adentro, formando pliegues, después dejar caer la masa con su propio peso, repitiendo por hasta ir emparejando la masa, después tapa con el trapo o una bolsa de plástico y deja reposar por 20 minutos.

Repite el proceso dos veces más con intervalos de reposo de 20 minutos y deja formada una gran bola, permite que repose por una hora, tapa con plástico adherible y mete al refrigerador por un día.

Pasado este tiempo, saca la masa, deja tapada a temperatura ambiente y espera a que repose por una hora, enseguida espolvorea harina de trigo en tu mesa de trabajo. Extiende la masa y para que sea más fácil trabajarla pártela por la mitad.

Trabaja una masa, removiendo los pliegues de la orilla hacia adentro y forma dos grandes bolas. Mete cada bola de masa en un recipiente con un trapo de algodón espolvoreado con harina y deja reposar por una hora, deja tapada la masa con el mismo trapo.

30 minutos antes precalienta el horno a 230 grados Centígrados y precalienta el recipiente donde meterás tu pan.

Después del reposo de la masa, pásala íntegra al recipiente, haz un corte recto y un poco profundo, tapa el recipiente y mete al horno por 20 minutos, después destapa, y mete otros 20 minutos. Repite con el otro pan y después deja enfriar en una rejilla para poder disfrutarlo.

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