Así puedes maridar el chocolate con el mezcal, te compartimos cuatro pasos básicos

Tanto el mezcal como el chocolate son dos productos muy mexicanos. De hecho, son especialidades que han dado identidad y orgullo a nivel internacional. Pero, ¿has tratado de saborearlos juntos? Se trata de un maridaje creativo y explosivo que tienes que probar.

En la Guía Turística Los Caminos del Mezcal se menciona que “de las 210 variedades de maguey que existen en todo el mundo, tan sólo en Oaxaca se encuentran 120, lo cual la convierte en una tierra no sólo rica, sino rebosante de sutilezas. Se producen mezcales de espadín (la variedad más común) en sus diferentes tipos: joven, con gusano, reposado o añejo; y de agaves silvestres como el arroqueño, el madrecuixe, el tepextate o el tobalá, por mencionar sólo algunos.

En cuanto al chocolate, se trata de un alimento que México heredó al mundo. Y ahora es uno de los productos más apreciados en el mundo.

“Chocolate deriva de la palabra azteca “xocolatl”, cuyo significado es “agua espumosa”, denominación que era utilizada por los Olmecas (1500- 400 A.C.), por los Aztecas (1400 A.C.), y posteriormente por los Mayas (600 A. C.) (1) para identificar una bebida amarga, de fuerte sabor, y de gran valor energético. La historia relata que el emperador azteca Moctezuma agasajó, en 1520, a Hernán Cortés y a sus soldados con xocolatl. El español comprobó que sus tropas podían soportar todo un día de marcha forzada consumiendo solo un vaso de xocoatl. Moctezuma creía que el conquistador español era la reencarnación de Quetzalcoatl, el Dios-Rey tolteca, y por tal motivo le obsequió la plantación real de cacao de Manialtepec, la que Cortés aprovechó muy bien, ya que estableció con los indígenas el intercambio de las avellanas del árbol del cacao por oro”, menciona Valenzuela B., Alfonso, en la Revista Chilena de Nutrición.

A continuación, te enlistamos cinco reglas para maridar el chocolate con el mezcal:

1.- Primero saborear un pedazo de chocolate en la boca, sin morder, ni masticar.

2.- Una vez que el chocolate haya quedado impregnado en tu paladar, toma una muy pequeña cantidad de mezcal y mantenla un ratito en la boca.

3.- Pasea el mezcal por tu paladar y disfruta sus sabores, poco a poco el  chocolate te envolverá con sus contrastes.

4.- Así puedes ir saboreando el chocolate, pedazo a pedazo, siempre dejando que se derrita en tu boca para luego tomar pequeñas cantidades del mezcal, recuerda que esta bebida se toma a besos para poder percibir todo el aroma y sabor que proporciona su proceso de elaboración.