4 tips para pelar almendras sin complicarte la vida, quedarán perfectas

Si alguna vez has cocinado con almendras sabes lo molesta que puede ser la cáscara de este fruto seco en tus recetas o lo difícil que resulta pelarlas por completo si no conoces los trucos adecuados para hacerlo, por eso esta vez te enseñaremos cuatro métodos diferentes para pelar tus almendras sin mucho esfuerzo y dejarlas perfectas para tus postres, bebidas o salsas.

Con agua hirviendo

Este es el truco más sencillo de todos, solamente necesitas colocar suficiente agua para cubrir tus almendras en una olla, lleva a fuego medio y justo cuando comience a hervir agrega tus almendras de forma directa, deja que repose el fruto seco durante treinta segundos y después cuela para dejar enfriar las almendras, una vez que puedas manipularlas te darás cuenta que puedes retirar la piel fácilmente con los dedos.

Con un paño de cocina

Si no quieres usar tus manos o no puedes esperar a que las almendras se enfríen, puedes usar un paño de cocina para facilitar aún más el trabajo, pon a calentar agua y una vez que rompa hervor, vierte el agua caliente sobre tus almendras en un recipiente, deja que reposen algunos segundos y cuela, coloca entre dos paños de cocina y frota vigorosamente las almendras con la tela, esto hará que la piel se desprenda y tus almendras saldrán sin cáscara.

Con microondas

Si tienes muy poco tiempo para pelar tus almendras entonces el microondas te ayudará a lograr tu propósito en muy pocos minutos, lo primero que debes hacer es colocar suficiente agua en un recipiente apto para el horno y llevarlo a tu microondas, calienta por 5 minutos y al salir vierte en el agua tus almendras, lleva de nuevo al horno y calienta por un minuto más, al salir podrás quitar la piel fácilmente a los frutos secos.

Tostándolas

Si quieres tostar tus almendras o llevan este proceso en tu receta entonces no te preocupes, no tendrás que humedecerlas antes para poder pelarlas, simplemente tuesta como normalmente lo harías en tu horno convencional, ten en cuenta que es mejor colocar las almendras sobre una rejilla antes de tostarlas para que sea más fácil hacer este truco, una vez fuera del horno, frota suavemente contra la rejilla y esta irá pelando las almendras sin esfuerzo.