Trucos sencillos para poner a secar el orégano u otras hierbas esenciales en la cocina

El orégano y otras hierbas de la cocina tienen múltiples usos, y no sólo para sazonar y potenciar los sabores de los platillos, sino también para hacer infusiones, remedios naturales o macerar aceites que son funcionales incluso como relajantes musculares, disminuir el estrés, aromatizar el ambiente o combatir algunas afecciones.

Si eres de las que ya se atrevieron a plantar sus propias hierbas aromáticas en casa, o simplemente tienes algunas plantas frescas por ahí y quieres que te duren un poco más, la mejor forma de seguirlas aprovechando es sin duda cuando están secas, ya que mantienen sus propiedades, pero duran mucho más tiempo almacenadas.

Pero si no sabes cómo hacerlo o lo has intentado en el pasado y resultó que no obtuviste un buen resultado, checa este artículo donde te damos trucos sencillos para poner a secar el orégano u otras hierbas esenciales en la cocina, verás que después de tomarlos en cuenta el resultado es el que se espera y obtendrás los mejores nutrientes, aromas y sabores de tus hierbas secas.

Trucos sencillos para poner a secar el orégano u otras hierbas

• Quita la tierra

Lo primero es limpiar bien el exceso de tierra que tienen las hierbas, si tus hierbas son orgánicas o las sembraste tú no tienes que preocuparte de desinfectarlas, pero si las compraste en el mercado lo mejor es lavar, desinfectar y dejar escurrir.

• Escoge las mejores

Desecha todas las hojas que estén decoloradas o que tengan negro, hoyitos u otras imperfecciones, para aprovechar las que realmente están en buen estado.

• Retira el exceso de agua

Lo siguiente es eliminar el exceso de agua, pues si simplemente las dejas secar así pueden generarse hongos que afecten el resultado final. Con un paño seco o una servilleta de cocina presiona las hierbas hasta retirarles toda la humedad.

• Extiende

Ya sea que elijas el horno o secarlas en rejilla, debes dejar secando tus hierbas de forma extendida, esto es colocando las ramas en una superficie limpia sin que se toquen, para que así obtengan aire o calor de forma independiente.

• Elige el método

Puedes secarlas en una rejilla, en horno o con hilo, cada método tiene sus ventajas, pero el resultado es regularmente el mismo en sabor, sólo varían los tiempos y algunas hierbas no son tan recomendables secarlas en el electrodoméstico.

• Usa el horno

El horno es un instrumento ideal para secar el orégano y otras de hojas como el perejil, el tomillo, la menta, la salvia y la albahaca. Colócalas en tu horno a 82 grados Centígrados, extiende las hierbas en una charola con papel para hornear o rejilla y mete por 15 minutos, después revisa y voltea, repite. Algunas pueden durar hasta una hora en terminar de secarse.

• Espera a que se enfríen

En el caso de que optaste por el horno, debes esperar a que se enfríen completamente antes de usarlas o almacenarlas y esto debe ser a temperatura ambiente. El tiempo de espera es de alrededor de 40 minutos.

• Con rejilla

Coloca las hierbas en una rejilla de meta, una manta de cielo o un trapo limpio, déjalas en un lugar donde tengan buena ventilación y dales la vuelta de vez en cuándo para terminar de secarlas. Este proceso suele durar de 10 a 15 días.

• Secado con hilo

Otra forma muy común de secar las hierbas es con hilo, sólo tienes que hacer unos ramilletes con las hierbas, atarlas del tallo y ponerlas boca abajo colgadas de un lazo o una varita de madera, de preferencia despegadas de la pared para que se aireen correctamente.

• Determina si se secaron bien

Para saber si se secaron bien debes observar un resultado en el que las hojas conserven su color, estén crujientes al tacto y tengan aroma. Si se ven amarillas las hojas perdieron sus propiedades y esto significa que el método no estuvo bien ejecutado.