Bebidas

¿Cómo tomar el té verde para adelgazar el abdomen?

Esta bebida tiene un efecto termogénico, es decir, eleva el gasto calórico y promueve la oxidación de grasas en el organismo
martes, 17 de noviembre de 2020 · 12:58

Afecciones como el sobrepeso y la obesidad continúan en incremento a nivel mundial, una realidad que lamentablemente también implica que las enfermedades relacionadas con estas condiciones aumenten. Una de las principales causas de este problema de salud mundial se debe al incremento en la ingesta de energía y una disminución en el gasto de la misma; un asunto en el que té verde puede intervenir.

Delicioso y novedoso esas son las palabras con las que muchos asocian con el té verde, pero en realidad, el uso de esta bebida fue descubierto por los chinos, quienes ya lo usaban en el 2737 antes de Cristo para mejorar la salud. En este periodo se reservaba para uso exclusivo de los sectores más opulentos de la población, aunque este remedio comenzó a extenderse entre los ciudadanos de cualquier estrato después de la caída del Imperio mongol durante la Dinastía Ming. Su proceso de elaboración es una auténtica tradición pues implica recoger las hojas frescas del té verde, someterlas a secado, prensarlas, enrollarlas, triturarlas y luego volverlas a secar.

Un elixir para la salud

Ahora, es conocida por todo el mundo como una importante fuente de minerales, entre los que destaca el potasio, calcio, sodio, flúor, manganeso y hierro. Además de que muchas veces también es aprovechado por diversas bondades entre las que destacan las porciones de cafeína que aporta, estimulando al sistema nervioso central cuando se consume de manera natural. Este té también posee muchos más antioxidantes que otros, como el negro o el rojo, debido a que está mucho menos procesado y ha sufrido una menor oxidación. Estos compuestos químicos son fundamentalmente utilizados por el cuerpo para eliminar los radicales libres, responsables de la oxidación de las células y por tanto del envejecimiento prematuro, así como la aparición de células cancerígenas. Al mismo tiempo, esta sustancia nootrópica y adaptogénica potencia la actividad cognitiva, favoreciendo el proceso de formación de nuevas neuronas de células madre, mejorando la memoria, atención, concentración y aprendizaje.

El té verde y la pérdida de peso

En diversas ocasiones se ha propuesto que el té verde tiene un efecto en la reducción del peso corporal que está relacionado con su contenido de catequinas, entre las que destaca el galato de epigalocatequina el cual, según investigadores franceses, tiene un efecto termogénico, o sea que eleva el gasto calórico y promueve la oxidación de grasas en el organismo.

Sumado a esto y de acuerdo con un estudio publicado en el National Library of Medicine esta bebida también puede reducir problemas como la obesidad y afecciones cardiovasculares.

Para esta investigación se reclutó a mujeres y hombres japoneses con obesidad de tipo graso visceral, quienes después de un período de preparación de la dieta de 2 semanas, participaron en un ensayo en el que ingirieron dos grupos ingirieron té verde, uno con 583 mg de catequinas (grupo de catequinas) o 96 mg de catequinas (grupo de control) por día. Después de que mantuvieron su ingesta dietética habitual y la actividad física normal, se encontraron resultados con notables disminuciones, no solo en el peso corporal; sino también en el índice de masa corporal, la proporción de grasa corporal, la masa de grasa corporal, la circunferencia de la cintura y cadera y el área de grasa visceral

Además, se encontró una mayor disminución de la presión arterial sistólica en el grupo de catequina en comparación con el grupo de control.

El té verde contiene además cafeína, la cual también ha sido asociada a la disminución y control del peso corporal en humanos, por medio de la estimulación de la termogénesis y la oxidación de las grasas.

¡Prepáralo!

Ingredientes:

1 cucharada pequeña de hojas secas de té verde o 1 bolsa de té verde

1/2 limón

1 cucharada pequeña de miel

1 vaso de agua

Preparación:

Vierte el agua en una olla y déjala hervir 15 minutos. Luego apaga el fuego y agrega el té verde, después deja reposar durante 5 minutos.

Ahora cuela el té y agrega dos cucharadas de zumo de limón recién exprimido.

Finalmente, añade miel al gusto para endulzar.