Opinión

A pedir de boca: El año que fue

Cierro el año con la certeza de que cada sabor, cada palabra, cada experiencia ha tejido la trama de nuestras historias...
viernes, 22 de diciembre de 2023 · 01:22

Todavía no estoy parado en la Puerta del Sol, aunque al momento de escribir este texto espero con ansias el poder subirme a ese avión que cierre el año y me lleve lejos. Lejos de 365 días de sabores dulces, ácidos y amargos que se van despidiendo, dejando tras de sí lecciones grabadas en el paladar.

Con los vapores y calores de la primavera y el verano, se cocinaron procesos que llevaban congelados algún tiempo, como si fueran recetas que requirieran la paciencia de un buen cocinero. Y es que, al igual que el caramelo se derrite en la boca, las experiencias se deslizan por los días y horas, acompañados por el estruendo de los utensilios en una cocina bulliciosa. A veces el desequilibrio agrega un toque de emoción a la rutina.

Entre las hojas que caen como versos, comprendo que la vida es una colección de sabores únicos. Y aunque la armonía de los ingredientes pueda ser reconfortante, encuentro fascinación en el desorden que surge cuando elementos
dispares chocan.

Con el invierno en la puerta, reflexiono sobre las lecciones del año. Y me doy cuenta que al igual que la cocina, la música y la poesía, la verdadera belleza no sólo está en los detalles, sino en el caos que da forma a la obra.

Cierro el año con la certeza de que cada sabor, cada palabra, cada experiencia ha tejido la trama de nuestras historias. Pero más allá del cierre, veo el 2024 como un banquete por descubrir, donde la vida, con su equilibrio y desequilibrio, ofrece una danza intrigante. La oportunidad de una existencia emocionante y llena de sabor está ahí para ser tomada, en medio de la armonía y del caos.

Haz de cerrar el año y disfrutar el que viene tu propósito; el mío es encontrar más sabores que me hagan vibrar, más vinos que me hagan soñar y más recetas que me reten a mejorar –porque la gastronomía es más que comida, es vivir con intensidad, es arte que se saborea y emoción que se comparte en medio del tumulto de los comedores de la vida.

A brindar por un 2024 lleno de nuevos sabores y experiencias, donde el caos y el equilibrio se entrelacen de manera emocionante.

Que este viaje alrededor del sol sea más dulce, menos amargo y muy emocionante para todos.

¡Salud y buen provecho!