En México, tomar agua de jamaica es casi un ritual: se sirve en restaurantes, en fondas, en casa y hasta en la comida corrida. Su sabor acidito, refrescante y su color rojo intenso la hacen inconfundible para los mexicanos. Pero más allá de su sabor, la flor de jamaica tiene varios beneficios para la salud que la vuelven una de las infusiones favoritas.
La jamaica es rica en compuestos como las antocianinas y ácidos fenólicos, conocidos por sus propiedades antiinflamatorias, vasodilatadoras y antioxidantes. Es ideal para quienes buscan cuidar su presión arterial, evitar la retención de líquidos o simplemente tener una bebida natural sin azúcar (si no le agregas).
Sin embargo, algo que no todos saben es que la forma en la que preparas esta bebida puede marcar la diferencia entre aprovechar sus beneficios o no. ¿Eres de los que la hierve? Pues aquí te contamos por qué esa técnica podría estar arruinando todo los beneficios que tiene la flor.
¿Por qué no se debe hervir el agua de jamaica?.
La experta en nutrición Karla Itzél, mejor conocida en redes como @karlitze_nutricion, publicó un video donde aclara algo que muchos desconocen: no deberías hervir la flor de jamaica. La razón tiene que ver con la forma en que se alteran sus compuestos naturales al estar expuestos a temperaturas muy altas.
Cuando hierves la jamaica, gran parte de sus antioxidantes y ácidos orgánicos se degradan. Es decir, aunque el agua conserve el color rojizo característico, sus propiedades vasodilatadoras y antiinflamatorias podrían verse seriamente reducidas. De hecho, esto sucede con muchas plantas medicinales, cuyos nutrientes son sensibles al calor extremo.
Además, hervirla puede darle un sabor más amargo o ácido del que tendría si se prepara de otra manera. Así que si realmente quieres beneficiarte de todo lo que esta flor tiene para ofrecer, lo mejor es cambiar la forma en que la preparas.
¿Cuál es la mejor forma de hacer agua de jamaica?
La mejor manera de preparar agua de jamaica es infusionar la flor en agua a temperatura ambiente o ligeramente tibia (menos de 60 °C). De esta forma, los compuestos benéficos se liberan sin que sus propiedades se alteren por el calor. Lo ideal es dejarla reposar entre 4 a 8 horas para que el agua tome color, sabor y beneficios.
Antes de infusionarla, recuerda lavar y desinfectar la flor de jamaica. Aunque es un ingrediente seco, puede venir con polvo o residuos. Una vez limpia, solo tienes que colocarla en una jarra con agua, cubrirla y dejar que el tiempo haga su trabajo.
Puedes endulzarla con un poco de stevia o simplemente tomarla natural. Además de ser refrescante, es una forma sencilla y deliciosa de cuidar tu salud cardiovascular, ayudar a reducir la inflamación, mantener una buena hidratación y evitar bebidas con exceso de azúcar.
