Tener un jardín bonito y bien cuidado puede ser una tarea difícil cuando los chapulines aparecen y arrasan con todo a su paso. Estos pequeños insectos, aunque parezcan inofensivos, son capaces de devorar hojas, flores y brotes jóvenes en cuestión de horas. Si ya estás cansado de ver tus plantas sufrir, hay una solución casera, efectiva y económica que puedes preparar en casa.
Aunque en el mercado existen múltiples pesticidas, muchos de ellos contienen químicos que pueden afectar no solo a los chapulines, sino también al medio ambiente, mascotas y hasta a los humanos. Por eso, cada vez más personas optan por alternativas naturales que sean amigables con el ecosistema y seguras para el hogar.
Una de las opciones más populares y efectivas es el uso del ajo como repelente. Este ingrediente, además de ser fácil de conseguir, tiene un olor fuerte y propiedades antibacterianas y antifúngicas que ayudan a alejar a muchos tipos de plagas, incluidos los molestos chapulines.

¿Cómo preparar el repelente con ajo?
Para preparar este repelente, solo necesitas una cabeza de ajo, un litro de agua y, si lo deseas, unas gotas de jabón líquido biodegradable para que la mezcla se adhiera mejor a las hojas. Pela los dientes de ajo y licúalos con un poco de agua. Luego, deja reposar esta mezcla durante al menos 12 horas para que libere todos sus compuestos.
Después del reposo, cuela la mezcla y agrégala al resto del litro de agua en un atomizador. Si decides usar jabón, añade solo unas gotas y agita bien antes de aplicar. Este paso es clave para que el líquido se mantenga en las plantas durante más tiempo y sea más efectivo.
Rocía tus plantas cada tres días, enfocándote en el envés de las hojas y los tallos, que es donde los chapulines suelen esconderse. Con constancia y este remedio natural, pronto notarás que los insectos se alejan y tus plantas lucen más sanas y protegidas.