Los colibríes, con su vuelo ágil y colores brillantes, son visitantes muy especiales en cualquier jardín. Su presencia no solo embellece el entorno, sino que también indica que el espacio ofrece un ambiente saludable y lleno de vida. Para atraerlos, más allá de los bebederos con agua azucarada, una de las formas más efectivas es cultivar plantas que naturalmente los llamen.
Estos pequeños polinizadores se sienten atraídos por flores con colores vivos, especialmente los rojos, naranjas y rosas intensos y por especies que produzcan néctar en abundancia. Al ofrecerles una fuente natural de alimento, se fomenta su presencia constante y se contribuye al equilibrio del ecosistema del jardín.
Elegir las plantas adecuadas no solo embellecerá tu espacio verde, también creará un refugio para estas aves tan admiradas. A continuación, te compartimos algunas especies ideales para convertir tu jardín en un verdadero paraíso para colibríes.
Fucsia (Fuchsia magellanica)
Esta planta colgante es una de las más atractivas para los colibríes gracias a sus flores tubulares y colgantes de colores vibrantes como el rosa, púrpura y rojo. Además de ser decorativa, florece durante gran parte del año y se adapta bien a zonas frescas y con sombra parcial.
Trompeta de fuego (Campsis radicans)
También conocida como “enredadera trompeta”, esta planta trepadora produce flores grandes y de un rojo anaranjado intenso que resultan irresistibles para los colibríes. Necesita sol directo y espacio para expandirse, pero a cambio ofrece una explosión de color y néctar abundante.
Salvia roja (Salvia coccinea)
Esta variedad de salvia es muy buscada por los colibríes debido a sus flores rojas brillantes y su larga temporada de floración. Es una planta fácil de cuidar, resistente al calor y perfecta para jardines soleados. Además, también atrae a mariposas y otros polinizadores.
Cultivar estas especies no requiere ser un experto en jardinería, solo un poco de dedicación y gusto por la naturaleza. Así, tu jardín no solo florecerá con colores vibrantes, sino que también se convertirá en un refugio natural para estos pequeños visitantes alados.
