Uno de los factores que más debemos de cuidar cuando se trata del cultivo de árboles frutales es el riego y la cantidad de agua que le brindamos para su crecimiento, ya que no solo vamos a asegurar el buen estado de nuestro árbol, el líquido vital también influye directamente en el desarrollo de frutas de forma adecuada. Por eso es importante que brindemos hidratación a nuestras plantas correctamente y de manera periódica.
El agua es un recurso esencial para el desarrollo de las raíces, el crecimiento de las ramas, la salud de las hojas y la formación de los frutos. No obstante, regar de más puede ser tan perjudicial como regar de menos. Por eso, conocer la frecuencia y la forma correcta de riego es clave para mantener a los árboles fuertes y productivos.
Además de esto, también hay que considerar que las necesidades de agua cambian según la etapa de desarrollo del árbol, el tipo de suelo y la temporada del año. Así que ajustar el riego según estos factores puede hacer una gran diferencia en la salud de tus árboles frutales. Por eso es que resulta tan importante saber cuántas veces tenemos que regar a la semana o cómo hacerlo de la manera adecuada.

¿Cuántas veces debo regar los árboles frutales a la semana?
Los árboles frutales jóvenes pueden llegar a regarse de dos a tres veces por semana para asegurar un buen desarrollo. Por otro lado, los árboles adultos suelen necesitar un riego más profundo, pero una vez por semana, especialmente si ya están bien establecidos y se encuentran en localidades donde las lluvias suelen ser escasas. Toma en cuenta que esto puede variar ligeramente según la especie del árbol.
¿Cómo se riega correctamente?
Para regar tus árboles correctamente, lo ideal es hacer un riego lento y profundo que humedezca bien el sustrato y la zona de las raíces. Evita mojar las hojas o el tronco directamente y enfócate en el suelo alrededor del árbol. También es importante regar durante las primeras horas del día o al atardecer, ya que así evitamos las horas de sol intenso y, por lo tanto, la evaporación rápida del líquido.
¿Cómo cambiar el riego en primavera y en verano?
Estaciones como la primavera y el verano, donde el clima cálido y seco aumenta, pueden ocasionar que nuestros árboles necesiten más agua y de forma más frecuente. Durante estos cambios, puedes aumentar la frecuencia a dos veces por semana en árboles adultos y hasta cuatro veces en los más jóvenes. Pero es importante que observes las hojas y la tierra: si esta se ve muy suelta o las hojas se ven secas, es señal de que tu árbol frutal necesita más hidratación.