El mango es una de las frutas más esperadas del año. Su sabor dulce y jugoso lo hace perfecto para disfrutarlo solo o en una gran variedad de recetas durante su temporada, que suele ser de marzo a agosto en México. Durante este tiempo, es posible encontrarlo a un precio accesible, pero para llevar a casa la mejor calidad, es necesario saber cómo escoger las piezas en su punto óptimo de maduración.
Elegir un buen mango en el mercado no solo garantiza una mejor experiencia al comerlo, sino que también nos permite aprovechar al máximo sus beneficios nutricionales. Esta fruta es rica en nutrientes como la vitamina C, antioxidantes y fibra, lo que la convierte en una opción saludable que podemos incluir fácilmente en nuestra alimentación diaria.
Dado que no todos los mangos que encontramos en el mercado están en su punto de maduración adecuado para el consumo inmediato, es necesario aprender a escogerlos. Algunos pueden estar más verdes que otros y tener una pulpa demasiado dura. Por eso, es importante conocer ciertos trucos que te ayudarán a elegir las mejores piezas.

Revisa la firmeza de la pulpa
Un mango en su punto óptimo de maduración debe sentirse ligeramente suave al presionarlo con los dedos, pero la pulpa no debe hundirse demasiado. Si la pulpa ofrece mucha resistencia y se siente muy dura, es probable que el mango esté verde. Si, por el contrario, notas que la textura cede demasiado y está muy blanda, podría tratarse de un mango pasado.
Verifica el color de la piel
El color de la piel puede variar según la variedad de mango que estés comprando, pero un mango maduro suele presentar tonos uniformes y vibrantes, ya sean amarillos, naranjas o rojizos. Es importante conocer bien la variedad que vas a comprar, ya que existen algunos tipos de mango que pueden seguir teniendo tonos verdes, incluso si ya están listos para comer.
Aroma y peso
Estas características pueden ser más difíciles de observar, pero una vez que aprendas a identificarlas correctamente, te ayudarán a elegir el mango correcto. El aroma de un mango maduro suele ser dulce e intenso en la parte del tallo. Además, los mangos más pesados, en comparación con su tamaño, pueden indicar que tienen más pulpa y jugo.