El mundo de la cocina está lleno de mitos, y uno de los más populares es que los champiñones no deben lavarse antes de cocinarlos. Algunos aseguran que este hongo absorbe demasiada agua y pierde textura al cocinarse. Pero, ¿qué tan cierto es esto? ¿Realmente afecta su sabor o cocción? Aquí te lo contamos.
Los champiñones son un alimento versátil y delicioso que puede complementar infinidad de platillos. Además de su sabor, aportan fibra, bajo contenido en sodio y beneficios para la salud ósea. Su consumo también ayuda a reducir la inflamación y fortalecer el sistema inmunológico.
Si te has preguntado cómo limpiarlos correctamente y si realmente es malo mojarlos antes de cocinarlos, en esta nota te vamos a compartir todo lo que dicen los expertos respecto a este controversial tema. Con esta información, la próxima vez que prepares champiñones, lo harás con total seguridad.

¿Los champiñones se lavan antes de cocinarse?
Existe la creencia de que los champiñones no deben lavarse porque absorben agua y esto podría afectar su textura y proceso de cocción. Sin embargo, especialistas en gastronomía y seguridad alimentaria recomiendan limpiarlos adecuadamente para eliminar residuos de tierra y posibles contaminantes como bacterias.
A diferencia de alimentos como el pollo o la carne, que no deben lavarse para evitar la propagación de bacterias, los champiñones sí requieren un proceso de limpieza. Esto se debe a que crecen en sustratos orgánicos y pueden contener restos de tierra u otras impurezas. El método de limpieza dependerá de la preparación y del tiempo disponible. Algunas técnicas permiten desinfectarlos sin afectar su consistencia ni su sabor. A continuación te contamos cómo hacerlo de forma correcta.
¿Cómo limpiar los champiñones correctamente?
Si bien en los supermercados es común encontrar champiñones ya envasados ??y aparentemente limpios, no hay garantía de que estén libres de suciedad. Por eso, es recomendable aplicar alguno de estos métodos:
- Limpieza en seco con un paño o cepillo: Consiste en utilizar un paño limpio, papel de cocina o un cepillo especial para frotar suavemente la superficie del champiñón y retirar cualquier resto de tierra.
- Enjuague rápido con agua fría: Para evitar que absorban demasiada humedad, deben enjuagarse rápidamente bajo un chorro de agua fría durante unos segundos.
- Remojo en agua con vinagre o bicarbonato: Si los champiñones presentan más suciedad de lo normal, pueden desinfectarse con una mezcla de agua y vinagre blanco o bicarbonato de sodio. Después del remojo, es fundamental secarlos completamente con papel de cocina antes de cocinarlos.