Cada año, millones de hogares mexicanos se llenan del característico color naranja del cempasúchil para honrar a sus difuntos. Sin embargo, al terminar la temporada, muchas de estas flores se desechan, pese a que todavía pueden tener un uso sustentable en el jardín o en las macetas en forma de abono casero.
Expertos en agricultura coinciden que cempasúchil contiene nutrientes como nitrógeno, fósforo y potasio, esenciales para el crecimiento de las plantas, así que reutilizarlo como abono orgánico no solo ayuda a reducir los desechos, sino que también contribuye a mejorar la textura y fertilidad del suelo.
Si te estás preguntando cómo elaborar un abono casero utilizando las flores de cempasúchil de la ofrenda tras haber celebrado el Día de Muertos, a continuación te contamos el sencillo proceso que debes llevar a cabo para convertirlas en materia orgánica rica para el sustrato de las plantas o cultivos.
Cómo hacer abono con flores de cempasúchil
Preparar este abono es muy sencillo y no requiere productos químicos ni herramientas especiales. Necesitas los siguientes materiales:
- Flores de cempasúchil secas o marchitas
- Restos de frutas y verduras
- Cáscaras de huevo trituradas
- Tierra o composta
- Un recipiente o cubeta con tapa
Preparación:
- Retira los tallos gruesos del cempasúchil, córtalos en trozos más pequeños y corta los pétalos en partes más pequeñas o deshoja cada flor.
- Coloca todos los restos las flores en un recipiente junto con los restos orgánicos (frutas, verduras y cáscaras). Es importante mencionar que en este proceso también puedes utilizar otros desechos orgánicos que salen de la cocina para darles una segunda vida, así que permítete usar desde cáscaras de plátano hasta cascarones de huevo o restos de verduras.
- Cubre con una capa de tierra o composta y mezcla ligeramente, tapa el recipiente y déjalo reposar en un lugar sombreado durante unas tres o cuatro semanas.
- Remueve la mezcla cada par de días para que el oxígeno ayude al proceso de descomposición.
Cuando el abono adquiera un color oscuro y un olor a tierra húmeda, estará listo para usarse, así que puedes esparcirlo en las macetas de tus plantas, el huerto o el jardín para fortalecer otros cultivos y mejorar la retención de humedad en el suelo.
De esta forma convertirás las flores de cempasúchil de la ofrenda de Día de Muertos en un abono completamente ecológico para fortalecer la tierra de los cultivos o plantas en casa sin la necesidad de desperdiciar este elemento tan simbólico de la temporada otoñal.
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