Entre los elementos más representativos del Día de Muertos en México tenemos al cempasúchil, la flor que simboliza el camino que guía a las almas hacia los altares típicos de esta celebración. Su color naranja intenso suele inundar los mercados, jardines y hogares durante los meses de octubre y noviembre, que es la época de esta celebración, llenando el ambiente de tradición, aroma especial y mucha vida. Y aunque muchas veces se suelen comprar solo para decorar los altares, a veces la mejor opción es mantener esta planta en maceta, sobre todo para conservarla fresca y radiante toda la temporada.
Al tener el cempasúchil en macetas no solo prolongas su vida útil, también facilitas su cuidado y traslado, lo que te permite mantenerlas en buen estado y frescas por más tiempo. Cultivarla de esta forma te permite controlar el riego, la exposición solar, el tipo de sustrato y muchos otros factores más que se van a traducir en flores sanas y duraderas. Y si te gusta la jardinería, esta práctica te permitirá disfrutar de su crecimiento desde que la planta florece hasta que cumple todo su ciclo natural.
Cuidar de este modo al tradicional cempasúchil también te permite reutilizar la planta después de la temporada. Con esto nos referimos a que, una vez que se marchitan las flores, puedes dejar secar las cabezuelas, recolectar las semillas y sembrarlas al siguiente año para mantener viva la tradición, ahorrar dinero y cuidar el entorno mientras te empapas de la cultura mexicana de una forma muy especial. Aquí te vamos a decir cuáles son los cuidados que necesitas darle a tu planta de cempasúchil en maceta para que esta dure el tiempo suficiente.
Iluminación
Este tipo de plantas necesita recibir al menos 6 horas diarias de sol directo para mantenerse en buen estado. Por eso, si tienes tus cempasúchil en interiores, procura colocar la maceta cerca de una ventana donde pueda recibir suficiente luz de sol a lo largo del día. La falta de iluminación adecuada puede hacer que tu planta se debilite y pierda su característico color intenso y brillante.
Riego
Regar en exceso tus plantas de cempasúchil es uno de los errores más comunes en los que puedes caer. Debes cuidar regar únicamente cuando la tierra esté seca al tacto y evitar que el agua se estanque en la base de la maceta. Por eso también es necesario asegurarte de que tanto el recipiente como el sustrato cuenten con un drenaje adecuado. Así evitas que las raíces se pudran y la planta se debilite.
Sustrato
Para que el cempasúchil crezca sin problema necesitarás un sustrato suelto y bien aireado, así que puedes mezclar tierra negra con un poco de arena o perlita para lograrlo. Además, es necesario aplicar un fertilizante natural una vez al mes, lo que ayudará a mantener su floración por más tiempo. Si notas que las flores comienzan a marchitarse, corta las que estén secas y vas a estimular brotes de flores nuevas.
