El pan de muerto es uno de los mayores símbolos de la tradición mexicana durante la temporada de Día de Muertos. Con su esponjosa textura, y su característico toque de azúcar, se ha convertido en un infaltable en las ofrendas. Sin embargo, uno de los problemas más comunes es que, al poco tiempo de comprarlo o prepararlo, el pan pierde su suavidad y se endurece.
Este cambio suele ocurrir por la exposición al aire o por un mal almacenamiento, lo que arruina la experiencia de disfrutarlo en los días siguientes. A muchas personas les pasa que al querer acompañar su café o chocolate caliente, se encuentran con un pan seco y duro, muy alejado de su frescura original. Afortunadamente, existe un truco sencillo y definitivo para prolongar su vida útil sin que pierda sabor ni esponjosidad.
No importa si tu pan de muerto es de panadería artesanal o industrial, con este consejo práctico podrás mantenerlo fresco por más tiempo y degustarlo como recién salido del horno. Lo mejor es que no necesitas ingredientes extras ni herramientas complicadas. ¿Quieres saber cómo? Sigue leyendo para conocer los detalles.
El secreto para mantener tu pan de muerto suavecito
El secreto está en guardarlo en una bolsa de plástico hermética, retirando la mayor cantidad de aire posible antes de cerrarla. Esto evita que la humedad natural del pan se pierda y que el contacto con el aire lo reseque rápidamente. Si planeas consumirlo en los próximos 2 o 3 días, basta con este método para mantenerlo suave.
Pero si quieres conservarlo por más tiempo, el congelador se convierte en tu mejor aliado. Envuelve el pan en papel encerado o aluminio, colócalo en una bolsa para congelar y guárdalo. Cuando desees comerlo, solo tienes que dejarlo a temperatura ambiente unas horas o calentarlo ligeramente en el horno para devolverle su textura original.
Un último consejo es evitar guardarlo dentro del refrigerador, ya que este ambiente acelera el proceso de endurecimiento del pan. En cambio, el congelador mantiene sus cualidades intactas. Siguiendo estos pasos podrás disfrutar de tu pan de muerto esponjoso y delicioso durante toda la temporada, sin preocuparte de que se vuelva duro antes de tiempo.
