¿Te gusta el panqué de nata pero odias que dure tan poco tiempo fresco? Si no sabes cómo guardar este delicioso pan en tu hogar para que no pierda su textura esponjosa y su sabor delicioso, aquí te vamos a decir cuál es el mejor lugar de tu cocina para que el pan se mantenga fresco. Además, te contaremos cómo almacenarlo correctamente para extender su tiempo de vida por varios días.
Gracias a los ingredientes con los que está hecho, el panqué de nata suele perder su frescura en poco tiempo. Tanto el huevo como la harina, la mantequilla o la propia crema son alimentos que no duran mucho tiempo fuera del refrigerador, y lo mismo sucede con los productos elaborados a partir de estos ingredientes. No obstante, cuando se trata del pan, el refrigerador es el lugar menos indicado para guardarlo.
Al guardar pan en el refrigerador, lo único que vas a lograr es que este pierda más rápido su textura. Gracias a la alta humedad que existe en este espacio, es posible que el panqué de nata se vuelva pegajoso y con una textura densa y nada agradable. También es posible que suceda lo contrario: que pierda humedad más rápido, se reseque y quede muy duro. Por eso, en general, el pan no debe guardarse en el refrigerador.

Dónde guardar el panqué de nata
Para asegurarte de que el pan se mantenga en buen estado, lo mejor es elegir el lugar correcto de tu cocina para almacenarlo. Ya sabemos que el pan no va a durar mucho tiempo si no lo almacenas correctamente, así que evita dejarlo expuesto al medio ambiente. Lo mejor es buscar un lugar fresco, lejos del calor y el sol directo, bien ventilado y donde no se acumule la humedad. Puede haber dos sitios en tu cocina que cumplan estas características: la alacena y una panera.
Cómo guardar el panqué de nata
Ahora que sabes cuáles son los lugares más indicados para guardar tu panqué de nata de forma correcta, también debes aprender el modo adecuado para almacenarlo. No solo debes elegir el lugar correcto, sino también utilizar los utensilios óptimos para hacerlo. En el caso de los panes que son muy suaves y tienen mucha humedad, como el panqué de nata, lo ideal es utilizar un recipiente hermético o una bolsa con cierre resellable.
Además, este pan suele perder mucha humedad en la corteza, y es posible que, si utilizas estos elementos, el panqué nata termine pegándose fácilmente al material del que están hechos, perdiendo pedazos al intentar sacarlo. Para evitar este problema, puedes envolver tu panqué de nata en una servilleta o bolsa de papel y después introducir el pan envuelto dentro de los recipientes que ya te mencionamos. Así, tu pan se mantendrá en buen estado.