Plantas y jardín
¿Cómo utilizar el fertilizante de ortiga para revitalizar tus plantas ornamentales? Sigue este paso paso
Con el fertilizante de ortiga, puedes darles una nueva vida a tus plantas, y hacer que vuelvan a lucir radiantes
Si notas que tus plantas ornamentales están perdiendo su brillo y vitalidad, es momento de considerar el uso de un fertilizante natural. La ortiga, una planta común en muchos jardines, puede convertirse en tu mejor aliada para revitalizar esas plantas que parecen apagarse. Aquí te mostramos cómo preparar y aplicar este poderoso fertilizante de ortiga para que tus plantas irradien luz y vida.
¿Cuáles son las plantas ornamentales?
Las plantas ornamentales se cultivan y comercializan por sus características estéticas, que pueden incluir flores llamativas, hojas de colores vibrantes, un perfume encantador o un follaje exótico. Estas plantas son especiales en jardines, diseños paisajísticos y como elementos decorativos en interiores. Algunas de las más populares incluyen el Ficus, la Sansevieria, las orquídeas, las violetas africanas, los geranios y los bonsáis. Cada una de estas plantas, con su singularidad, aporta un toque especial a cualquier espacio. Sin embargo, para que mantengan su esplendor, es fundamental nutrirlas correctamente.
Beneficios del fertilizante de ortiga
La ortiga es conocida por ser rica en minerales como nitrógeno, potasio, magnesio y hierro, todos esenciales para el crecimiento saludable de las plantas. Además, contiene compuestos que actúan como estimulantes naturales, promoviendo el desarrollo de hojas verdes y fuertes, y mejorando la resistencia de las plantas frente a plagas y enfermedades.
El fertilizante de ortiga fortalece las plantas ornamentales al proporcionarles los nutrientes esenciales que necesitan para crecer. El nitrógeno en la ortiga promueve el desarrollo de hojas verdes y frondosas, mientras que el potasio mejora la resistencia a enfermedades y facilita la floración. Las orquídeas, por ejemplo, pueden mostrar flores más vibrantes y duraderas, mientras que las hojas de los ficus y las sansevierias pueden volverse más robustas y brillantes.
Además, este abono es especialmente útil para plantas que están estresadas por cambios de temperatura, falta de nutrientes o después de haber sido trasplantadas. Las propiedades repelentes de la ortiga también pueden ayudar a mantener alejadas ciertas plagas, contribuyendo a la salud general de tus plantas ornamentales.
Ingredientes y materiales:
- 1 kg de ortiga fresca (puedes recogerla de manera segura usando guantes)
- 10 litros de agua
- Un recipiente grande (puede ser un cubo o un barril)
- Un colador
- Guantes de jardinería
Preparación del fertilizante de ortiga:
- Usando guantes para evitar las picaduras, corta aproximadamente 1 kg de ortiga fresca. Asegúrate de elegir plantas que no hayan sido tratadas con pesticidas o herbicidas.
- Coloca la ortiga en un recipiente grande y cúbrela con 10 litros de agua. Remueve ligeramente la mezcla y tapa el recipiente. Deja que la ortiga se macere durante 10 a 15 días en un lugar oscuro y fresco, removiendo la mezcla cada dos días. Durante este tiempo, la ortiga liberará sus nutrientes en el agua, transformándola en un fertilizante líquido concentrado.
- Una vez que la maceración esté completa, filtra el líquido usando un colador para separar los restos de ortiga. El líquido resultante es el fertilizante que aplicarás a tus plantas.
- Diluye el fertilizante en agua en una proporción de 1:10 (una parte de fertilizante por diez partes de agua) y úsalo para regar las plantas ornamentales. Este fertilizante se puede aplicar cada dos semanas para mantener las plantas nutridas y saludables.
