¿Cómo injertar un árbol de guayabas desde tu casa? Sigue estos sencillos pasos

El injerto es una técnica agrícola que permite mejorar la producción y calidad de los árboles frutales, y el guayabo no es la excepción. Mediante este proceso, se unen dos plantas de la misma especie para obtener un árbol más resistente y con mejores frutos. Injertar un árbol de guayabas en casa es una práctica sencilla que, si se sigue correctamente, puede asegurar una cosecha abundante. A continuación, te explicamos cómo injertar un guayabo paso a paso.

¿Por qué injertar un árbol de guayabas?

La técnica de injertar tiene varias ventajas. Primero, permite combinar las características de dos árboles distintos. Por ejemplo, se puede elegir un patrón o portainjerto que sea resistente a enfermedades o que se adapte mejor a las condiciones del suelo, y se le puede injertar una variedad que produzca frutas de excelente calidad. Segundo, el injerto ayuda a acelerar la producción de frutos, ya que un árbol injertado puede empezar a dar guayabas en menos tiempo que uno que crece desde semilla. Además, es un método muy útil para salvar árboles que estén dañados o con un desarrollo lento.

Existen diferentes tipos de injertos, pero los más recomendados para guayabos son el injerto de púa y el injerto de yema. En esta guía te enseñaremos el injerto de púa, ya que es uno de los más sencillos y efectivos.

¿Cómo se injerta un árbol de guayabas?

Antes de comenzar, es necesario que cuentes con los siguientes materiales:

• Un cuchillo o navaja bien afilado y esterilizado
• Cinta de inyector o cinta aislante
• Tijeras de poda
• Una planta portainjerto (guayabo joven y saludable)
• Una púa o brote de guayabo que produce buenos frutos
• Sellador para injertos o cera de injerto (opcional)

Pasos para injertar un guayabo en casa

1. El portainjerto es la planta sobre la cual se realizará el injerto. Este debe ser un guayabo joven y fuerte, preferentemente de un grosor similar al de un lápiz. Es importante que el portainjerto esté sano y libre de plagas o enfermedades para asegurar el éxito del injerto.

2. La púa es la parte del guayabo que se injerta en el portainjerto. Se debe seleccionar una rama joven, pero bien desarrollada, de un guayabo que produzca frutos de calidad. La púa debe tener entre 10 y 15 centímetros de longitud y al menos dos o tres yemas visibles. Al cortar la púa, es importante hacerlo con herramientas esterilizadas para evitar infecciones.

3. Con ayuda de una navaja bien afilada, realice un corte recto en el portainjerto, a una altura de entre 15 y 20 centímetros desde la base. El corte debe ser limpio y sin desgarrar la madera. Luego, haz una hendidura vertical de unos 3 a 5 centímetros en el centro del corte.

4. En la parte inferior de la púa, realiza un corte en forma de cuña. Este corte debe ser diagonal y lo más simétrico posible para que encaje perfectamente en la hendidura del portainjerto. La púa debe tener al menos dos yemas hacia la parte superior.

5. Inserta la púa en la hendidura del portainjerto de forma que los cortes queden perfectamente alineados. Asegúrese de que los tejidos cambiales (la parte interna de la corteza) de ambas partes entren en contacto, ya que de esta conexión dependerá el éxito del injertor.

6. Una vez insertada la púa, utilice cinta de injerto o cinta aislante para asegurarla firmemente en su lugar. Envuelve bien la zona del injerto, asegurándote de que no quede expuesto al aire ni a la humedad, ya que esto podría afectar el proceso de cicatrización. Si lo desea, puede aplicar un sellador o cera para injertar en la parte superior de la púa para protegerla.

7. Coloque el árbol injertado en un lugar donde reciba luz indirecta y riego moderado. Evite la exposición directa al sol y el exceso de riego en las primeras semanas. Si notas que el injerto comienza a brotar, significa que el proceso ha sido exitoso. Después de unas semanas, puedes retirar la cinta con cuidado para no dañar la unión.