2 Tips que te permitirán conservar fresas sin que se aguaden o llenen de moho

Las fresas son una de las frutas más propensas a echarse a perder rápidamente si no se almacenan de la forma adecuada. Afortunadamente, existen un par de tips sencillos que permiten conservarlas frescas por más tiempo sin temor a que se aguaden (su pulpa se haga fea) o se llenen de moho.

Aprende a conservar fresas por más tiempo

Antes de conocer estos trucos, es importante elegir piezas frescas y maduras desde el punto en que se adquieren en el mercado o supermercado, que no sean flácidas, ya que si desde el principio son frutas en mal estado, pueden acelerar el deterioro de las demás.

Siempre compra fruta de calidad, de esta forma, cualquiera de los 2 métodos de conservación que lleves a cabo, tendrá el objetivo deseado. Ahora, es momento de descubrir ese par de tips caseros con el que la fruta se mantendrá en buenas condiciones por más días.

Cómo almacenar fresas

Primero debes tomar en cuenta que se deben lavar antes de consumirlas, no antes de almacenarlas, porque la humedad puede causar que se pudran más rápido. Solo limpia ligeramente con una servilleta de papel y jamás retires el tallo verde de las piezas, después resguárdalas de la siguiente manera. 

1.- En un refractario hermético

Luego de descartar cualquier fresa que esté dañada o en mal estado, ya que puede afectar a las demás, hay que colocarlas en un refractario hermético de vidrio sobre una ligera capa de servilletas de papel de cocina.

De esta forma la servilleta evitará la humedad entre las piezas y podrán durar hasta por 20 días cambiando constantemente las servitoallas. Además hay que colocar el refractario en el cajón de frutas y verduras.

2.- En una bolsa de plástico

Una bolsa de plástico hermética puede ser el contenedor perfecto para almacenarlas, solamente hay que colocar una capa de servilletas y acomodar las piezas de forma que no se aplasten y se estropeen entre ellas.

En ambos métodos tendrás que colocarlas en refrigeración y cambiar las servilletas de papel de cocina, después de tres días para evitar que resguarden humedad y en los próximos días se puedan disfrutar de fresas completamente frescas sin moho y con la pulpa perfecta para preparar tus recetas favoritas.