2 Formas de germinar semillas de manzana para tener tu propio árbol frutal desde cero

Si cuentas con un huerto urbano con un espacio apropiado dentro del jardín en casa para tener un árbol manzano, seguro que te interesará conocer un par de formas sencillas y prácticas para germinar semillas de manzana y tener este preciado cultivo frutal desde cero con total éxito. 

Cuidados esenciales del naranjo

Para que el proceso sea exitoso, es importante germinar y cultivarlas en una maceta o directamente al suelo, pero que siempre sea un área con un buen drenaje y reciba suficiente luz solar hasta por 6 u 8 horas al día. Y jamás te olvides del riego, en los primeros años necesita de mucha agua sin encharcar el sustrato.

Presta atención a la siguiente información para descubrir cuáles son esas dos formas de germinar algunas semillas de manzana (de cualquier color) frescas para tener tu propio árbol frutal desde cero en el huerto urbano y ser testigo de su crecimiento saludable.

Cómo germinar semillas de manzana

Estos dos métodos son exitosos, así que elige el que más se te facilite.

1.- Germinación en agua

Corta un par de manzanas frescas y de calidad, extrae las semillas completas, limpia y retira todos los restos orgánicos que puedan, basta con enjuagar con un poco de agua. Colócalas en un vaso o tarro con agua para que se remojen por toda una semana y aumenten su volumen.

Después de ese tiempo, saca con cuidado seca un poco con una servilleta de papel y entierra sobre un par de semilleros con tierra fértil y una buena cantidad de sustrato. Aquí deberán permanecer por aproximadamente dos meses hasta que comiencen a brotar los primeros tallos, pero para que esto suceda, tendrás que hidratar periódicamente con agua y exponer los semilleros frente a los rayos de luz solar directa.

2.- Con algodón

También extrae un par de semillas frescas.

Coloca varias capas de algodón bien compactado al fondo de un envase limpio, humedece con agua sin que haya escurrimiento y distribuye las semillas en la superficie.

Coloca una nueva capa de algodón compactado y humedecido encima de las semillas y tapa el envase. Resguarda en un lugar a temperatura ambiente en donde pueda recibir luz solar directa por algunas horas al día y no te olvides de seguir manteniendo la humedad del algodón, pues aquí deberán permanecer hasta que broten sus primeras raíces.

En ambos casos después de que brotaron sus primeras raíces y éstas ya lograron alcanzar aproximadamente 10 cm de largo, será el momento para trasplantarlas en una maceta o tierra fértil del huerto urbano, con mucho cuidado para no lastimarlas o romperlas.

De estas dos formas podrás germinar exitosamente las semillas de manzana para convertirlas en un frondoso árbol frutal si es que se llevan a cabo los requerimientos básicos para que crezca de poco en poco.