Errores que estas cometiendo al cultivar jitomates en maceta, ¡evítalos!

Estás cultivando jitomates en maceta y no sabes por qué tu planta no genera frutos. Si te cuesta trabajo mantener en buen estado este cultivo, es probable que estés cometiendo uno o varios errores en sus cuidados. Aquí te explicaremos cuáles son los errores más comunes al cultivar jitomates en maceta para que los evites y logres siempre una planta de jitomates grande y llena de frutos.

Riego

Cuando se trata del riego en las plantas de jitomate cultivadas en maceta, es muy importante agregar la cantidad exacta de agua. Dado que el espacio para estas plantas es limitado, es posible que tu cultivo de jitomate requiera más agua de la que una planta en tierra necesita. No obstante, agregar agua de más también es un problema que puede ocasionar la pudrición de las raíces y, por lo tanto, la pérdida de la planta.

Espacio

En conjunto con el punto anterior, el espacio también es un factor importante que debes vigilar para que tu planta se desarrolle correctamente. Tu maceta debe tener un drenaje adecuado para evitar el encharcamiento y el exceso de agua. Así mismo, debes evitar macetas de capacidades pequeñas, pues la planta necesitará bastante espacio para poder crecer de forma adecuada. Recuerda que tanto la profundidad como el espacio horizontal son muy importantes para el cultivo de jitomates.

Enrejado

De igual manera, un entutorado o enrejado es esencial para cultivar esta planta. El cultivo de jitomate requiere una estructura para que la planta vaya subiendo y tenga puntos de agarre para evitar que el peso de los frutos rompa la planta. Por lo tanto, si no tienes un enrejado adecuado para que tu planta crezca y se sostenga, es muy poco probable que pueda producir frutos de forma correcta.

Podas

Aunque esto no parezca importante, es vital llevar a cabo podas periódicas en tu planta de jitomates. El aprovechamiento de recursos es esencial si quieres que este cultivo produzca muchos jitomates y, por lo tanto, debemos eliminar todas esas partes de la planta que están utilizando recursos pero no producen frutos. Por eso, es necesario hacer podas en los primeros 20 cm de la planta, eliminando hojas y tallos secundarios que solo estarán absorbiendo los nutrientes que deberían ir hacia las partes de tu tomatera que producen frutos.