Huerto en casa

Descubre 2 formas para utilizar cáscaras de cebolla y ajo como un poderoso insecticida del huerto

Aprovecha los residuos de las cáscaras de cebolla y de ajo para crear un insecticida casero
sábado, 27 de julio de 2024 · 18:10

Las cáscaras de cebolla y ajo pueden funcionar como un poderoso insecticida casero que previene insectos comunes como los pulgones, ácaros, hasta algunos tipos de hongos que afectan a los cultivos del huerto urbano o esas plantas que se encuentran al interior de la casa. En realidad son una de las mejores alternativas ecológicas que los expertos de este tipo de áreas verdes aplican.

La tarea es tan sencilla como ir recolectando este tipo de desechos orgánicos para dejarlos secar en un lugar fresco, mientras se utilizan o inmediatamente, hacer una especie de repelente para combatir y prevenir plagas de insectos y hongos de manera efectiva.

Descubre dos formas diferentes para utilizar esas cáscaras de cebolla y de ajo como un poderoso insecticida del huerto urbano en el que lograrás crear fórmulas suaves pero completamente efectivas para proteger a los cultivos más importantes o aquellas plantas que por alguna razón resultaron afectadas. 

Recolecta las cáscaras de ajo
Recolecta las cáscaras de ajo
FOTO: Pixabay

Cómo utilizar las cáscaras de cebolla y ajo para crear un insecticida 

Cualquiera de estas dos maneras permitirá salvar el huerto o esas plantas que han sido afectadas por la presencia de plagas.

1.- De forma líquida

Debido a que la cebolla cuenta con una buena cantidad de azufre y el ajo cuenta con propiedades antibacterianas se convierten en el mejor ingrediente para elaborar un repelente líquido, solo basta con licuar cantidades iguales de ambos desechos por un litro de agua y aplicarlas de manera directa en los cultivos. 

Insecticida a base de cáscaras de cebolla y ajo
Insecticida a base de cáscaras de cebolla y ajo
FOTO: Shutterstock

2.- De manera líquida con más ingredientes o insumos naturales

Cuando la infestación por plagas es grave se necesita no solo sumar las propiedades de ambos desechos, sino reforzar su poder con más ingredientes o insumos naturales que también se encuentran en la cocina. Aquí puedes licuar de tres a cuatro cáscaras de ambos desechos por medio litro de agua y una taza de vinagre blanco, colocar la solución en una cubeta y mezclar con una cucharadita de jabón líquido para lavar trastes o jabón neutro rallado, así tendrás un poderoso pesticida qué erradicará el problema desde la primera aplicación.

Ahora ha llegado el momento de elegir alguna de estas dos opciones para utilizar las cáscaras de cebolla y de ajo como una opción natural, económica, fácil y accesible para evitar plagas en el huerto.